Las mascarillas empiezan a ser obligatorias en muchos países de todo el mundo. Dejando de lado el punto de vista sanitario y protegernos de posibles contagios por el coronavirus, las mascarillas nos tapan una parte de la cara y eso incluye también varias expresiones faciales, incluso, para aquellos que se les hace difícil expresar las emociones. Utilizamos las mascarillas para ir a comprar, quedar con los amigos o para ir a trabajar, donde la media sonrisa de un "gracias" queda escondida y la mirada de complicidad, cuesta más de interpretar.

"Es un error pensar que las mascarillas nos dificultarán la interacción", explica la psicóloga y profesora experta en comunicación de la Universidad Humboldt de Berlín Ursula Hess en la CNN. "Expresamos nuestros sentimientos de muchas maneras diferentes que no dependen de la parte inferior de nuestra cara". Así, según detalla hay movimientos sutiles, como por ejemplo, el movimiento de una ceja o golpear el puño sobre la mesa. Todo dice mucho de una persona.

Hess recuerda que las sonrisas no sólo se pueden ver sino que también se pueden escuchar. "Cuando la boca cambia de forma, altera la voz". De esta manera, subraya que la "diferencia es clara. Todos pueden escuchar cuando alguien sonríe por teléfono". La experta pone énfasis en el hecho de que algunas emociones quedan plasmadas en nuestras caras. "¿Cómo se comunica la esperanza?", se pregunta. "Ponemos una expresión determinada y lo acompañamos con una voz esperanzada, por lo tanto, las voces también pueden expresar emociones".

Así, Hess detalla que la mayoría de personas son buenas con el fin de detectar una variedad de emociones diferentes a través de los ojos y la parte superior de la cara, a veces, incluso sin darse cuenta de ello. Por lo tanto, a pesar de las mascarillas, no tendríamos que dejar de escuchar ni interpretar las emociones. A algunos, sin embargo, quizás les hará falta más práctica.

Una mascarilla transparente

Quizás precisamente por este motivo, hace unos días se anunciaba la aparición de una mascarilla íntegramente transparente. El proyecto ya ha entrado en fase de producción, tal como anunciaba la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL), dónde se ha desarrollado. Y aunque primeramente estará destinada al personal sanitario para mejorar la relación entre el personal médico y los pacientes, quienes sabe si en un futuro próximo las veremos por la calle.

Ahora bien, el proyecto empezó mucho antes del inicio del coronavirus. La institución académica y de innovación suiza trabajaba desde hace dos años en esta máscara y la aparición de la Covid ha sido una casualidad. Sin embargo, esta situación ha hecho que su utilidad sea todavía más relevante y la financiación para empezar su producción haya sido fácil de obtener.

 

EN DIRECTO | La última hora sobre el coronavirus y sus afectaciones en Catalunya, España y el mundo

MAPA | Los contagios de coronavirus en Catalunya por municipios y barrios

MAPAS | El impacto del coronavirus en Catalunya por regiones sanitarias

🔴 Sigue ElNacional en Telegram