El incendio de la Mezquita-Catedral de Córdoba, patrimonio de la humanidad, que se declaró la pasada noche, encendió las alarmas y encogió el corazón de los cordobeses y de toda Andalucía. Pero afortunadamente, no se produjeron víctimas o heridos, y el suceso ha quedado reducido al susto y algunos daños materiales, que han afectado en dos capillas y en la cubierta, cuyo techo colapsó esta madrugada, según ha informado a El País José Juan Güeto, el canónigo del Cabildo, el órgano que gestiona el edificio, que ha especificado que "esta capilla no tiene ningún valor patrimonial".
El rápido control del fuego, la clave
El fuego, que empezó en la zona Almanzor, que se utilizaba como almacén de la maquinaria que se utiliza habitualmente en el templo milenario, se pudo extinguir rápidamente. De hecho, el incendio se originó hacia las 21.15 horas, pero hacia las 22.00 horas ya estaba bajo control. Aunque habrá que esperar al avance de las investigaciones para determinar el origen exacto del incendio, las primeras pesquisas apuntan en el hecho que se podría haber iniciado por un fallo en una máquina de limpieza situada entre la capilla del baptisterio y la capilla del Espíritu Santo. Una dotación ha estado durando la noche haciendo tareas de vigilancia para asegurar que no volviera a reavivar el incendio, y enfriando las paredes afectadas. El personal de mantenimiento ha trabajado en tareas de limpieza, con el objetivo de reabrir el templo en el horario habitual este sábado.
Cubiertas y muros afectados en dos capillas
Las llamas afectaron a principalmente las cubiertas y los muros de dos capillas (la del Baptisterio y la del Espíritu Santo), provocando el colapso del techo en una de ellas y daños en los arcos de la ampliación de Almanzor, construida en el siglo XI. También se desprendieron diversos enfoscados y quedó dañado el retablo de la Expectación. Los bomberos consiguieron controlar el fuego antes de que se extendiera más, y aseguraron que el incendio quedó completamente extinguido pasadas las 00.40 del sábado. Aunque el incendio causó daños considerables en la zona afectada, las autoridades insisten en que no se trata de una catástrofe para el monumento, que está fuera de peligro en su conjunto. Las tareas de extinción evitaron que se propagara más, y se destaca que gracias a los simulacros anuales, los bomberos estaban familiarizados con el monumento, a lo cual ayudó a mitigar los daños. En diferentes publicaciones en las redes sociales se puede ver cómo ha quedado por dentro de la Mezquita y las zonas afectadas después del incendio, mientras los bomberos llevaban a cabo las tareas de extinción.
"Nos ha asustado en todos"
Las reacciones de los ciudadanos se han sucedido a las redes sociales, y también de los políticos, que han coincidido en admitir que temieron por la suerte de la mezquita, pero que la rápida intervención de los bomberos evitó una catástrofe. "En todos nos ha dado una vuelco el corazón", admitió el alcalde de la ciudad, José María Bellido, que se congratuló que el incendio no ha sido "una catástrofe" y que "el monumento está fuera de peligro". El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla, ha reconocido en una publicación en la red X que el incendio "nos ha sobrecogido a todos".
También la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda y secretaria general del PSOE de Andalucía, María Jesús Montero, ha reconocido en su cuenta en X estar "impactada" por las imágenes del incendio de la Mezquita, para indicar entonces que el suceso "nos ha sobrecogido a todos".