El embarazo es un estado de riesgo si se padece la gripe. La infección por el virus de la gripe durante el primer trimestre de embarazo se ha asociado a un aumento de malformaciones cardiacas, labio leporino y defectos del tubo neural. Y durante el segundo y tercer trimestre a un mayor número de abortos y partos prematuros.
Por este motivo, según han informado desde la Asociación Nacional de Enfermería y Vacunas (Anenvac) y el Consejo General de Enfermería han dado a conocer en un vídeo animado en el que se cuenta que hay tres vacunas que deberían ponerse todas las embarazadas este invierno. “En estos meses en los que parece que solo existe el covid-19 queremos recordar a las mujeres que deben vacunarse no sólo del covid-19, si no de la gripe y la tosferina para evitar complicaciones o, incluso, la muerte de su futuro bebé. Las tres vacunas con eficaces y seguras y, sobre todo, efectivas en la prevención de formas graves de la enfermedad, hospitalización y fallecimiento. Deben recordar que se están vacunando por ellas mismas y por sus futuros hijos”, resalta Florentino Pérez Raya, presidente del CGE.
Las mujeres deben saber que al recibir ellas el inmunógeno, la transferencia de anticuerpos al futuro recién nacido se realiza a través de la placenta. La mujer gestante recibe la vacuna, fabrica los anticuerpos para autoprotegerse y por medio de la placenta proteger al bebé. Además, se cuenta con información suficiente que permite acometer la vacunación en estos periodos críticos con un importante grado de seguridad de que no causa daños en la madre, en el feto, ni en el bebé lactante.
A pesar de estos beneficios, son muchas las embarazadas que tienen miedo a vacunarse por miedo a que los efectos secundarios afecten a su bebé. Pero no deben tener ese miedo porque precisamente con la vacunación frente a la gripe, el covid-19 y la tosferina se protegen ellas mismas y protegen al futuro recién nacido. En el caso de la vacunación frente a gripe y covid-19, se evitan, abortos, partos prematuros y mal formaciones en el futuro niño. En el caso de la vacunación frente a tosferina, se protege al bebé de padecer la enfermedad hasta los 6 meses de vida. La tosferina es una enfermedad grave en el lactante con ingresos hospitalarios e incluso fallecimientos. Como resumen, la vacunación de la mujer embarazada es un acto altruista, donde el beneficio se ve multiplicado por dos: para la propia mujer gestante y para el futuro recién nacido.
Un beneficio añadido de la vacunación de la gestante y la madre que da el pecho a su bebé es que una parte de los anticuerpos generados por la vacunación se transfieren al feto a través de la placenta y al lactante a través de la leche materna. Y es que dar el pecho al recién nacido no contraindica la vacunación frente a ninguna de estas tres patologías, es más, si la mujer gestante, por el motivo que sea, no ha sido vacunada durante el embarazo, existe especial indicación durante la época de lactancia. Para la gripe hasta seis meses después del parto, para el covid-19 porque se han encontrado anticuerpos en la leche materna de las mujeres vacunadas y para la tosferina para evitar contagiar al recién nacido.