Los perros, además de ser buenos animales de compañía para las personas, pueden convertirse en un talismán a la hora de encontrar una cura para el tumor cerebral. Así lo cree un equipo de científicos del Jackson Laboratory for Genomic Medicine en Estados Unidos, que tras realizar una investigación publicada en la revista Cancer Cell, ha concluido que esta especie animal puede ayudar a comprender los mecanismos clave de los tumores cerebrales en las personas.

En concreto, el estudio se ha centrado en los gliomas, una forma común de cáncer cerebral que se desarrolla en el sistema nervioso central y que afecta a las células gliales del cerebro, que sirven de soporte a las neuronas y tienen una función fundamental en el procesamiento cerebral de la información.

Glioma

El problema es que este tipo de tumor despierta muchas incógnitas en la comunidad científica, por el grado de desconocimiento que existe de la enfermedad y su avance. No se sabe la razón por la que estas células se vuelven cancerosas ni cuál es su patología molecular. De hecho, es un cáncer muy complicado a la hora de tratar y sólo el 5% de las personas tienen una tasa de supervivencia mayor de 5 años.

Al igual que las personas, los perros también pueden desarrollar gliomas, aproximadamente a la misma edad –trasladado a años humanos– que los niños, por lo que los científicos creen que puede haber un vínculo con la edad del cerebro y el desarrollo del tumor.

La mayor parte de los estudios se han realizado con ratones, pero lo cierto es que el desarrollo del mismo no tiene nada que ver con lo que sucede en las personas, a diferencia de lo que ocurre en el caso de los perros. Por lo tanto, los científicos se muestran esperanzados de que nuevas investigaciones con estos animales permitan lograr un avance significativo en la lucha contra la enfermedad. Unos animales que también se ha descubierto que son capaces de detectar la presencia de cáncer en los seres humanos.

La investigación

El estudio en concreto, tuvo como objetivo identificar si los gliomas se desarrollan de la misma manera en perros y humanos. Para ello, evaluaron 83 muestras de las células cancerígenas de los perros y las compararon con otras biopsias llevadas a cabo en adultos y niños enfermos.

Los expertos descubrieron que ambas especies compartían mutaciones en los genes, por lo tanto, la aparición de los tumores se producía de manera similar en ambos casos.  El equipo también descubrió que los gliomas en los perros se parecían más a los gliomas en los niños que a los adultos y, además, las mutaciones ocurrían en edades similares. Y no solo eso, también hubo similitudes a nivel cromosómico y en el sistema inmune del tejido que rodea los tumores.

Retriever

Los científicos creen que el uso de tratamientos que ya han sido puestos en práctica para curar el glioma en los perros, podría producir avances en el tratamiento el tumor en las personas. En el caso de la inmunoterapia, que ya se ha probado con éxito en los perros.