Hace más de un año que convivimos con la palabra coronavirus. En todo este tiempo, el virus ha provocado más de 120 millones de infecciones y ha causado 2,65 millones de víctimas mortales. A pesar de todo, después de más de 365 días de los primeros casos de coronavirus y 12 meses de estado de alarma, todavía hay cosas que se desconocen.

Por ahora, se sabe que algunas medidas de protección y distancia social, como por ejemplo, el uso de la mascarilla, distancia, higiene de manos y ventilación ayudan a romper las cadenas de transmisión del virus. También se ha constatado que el virus no sólo afecta a las personas mayores. Pero todavía no hay tratamientos efectivos contra la Covid y aunque ya hay vacunas aprobadas y muchos países han empezado las campañas de vacunación, hay problemas de distribución.

Los efectos a largo plazo

Son muchas las personas que han sufrido afectaciones en el gusto y el olfato, unos efectos que pueden persistir en el tiempo. También el dolor de cabeza, en algunos casos, perdura más que la misma infección. Otros sufren una Covid de larga duración o persistente. Entre estos síntomas están la dificultad para respirar, fatiga prolongada, dolor de cabeza, articulaciones y pérdida de gusto y olfato.

Tal como recoge la BBC Mundo, un estudio elaborado por el King's College detalla que uno de cada 20 enfermos de coronavirus lo está, como mínimo, ocho semanas. Pero sigue siendo un misterio qué pacientes pueden sufrir una Covid persistente y el impacto real del virus.

La evolución del virus

China registró los primeros casos de coronavirus a finales del 2019, pero no fue hasta el 11 de marzo del 2020 que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el coronavirus como "pandemia" de manera oficial. La gripe española, el sida, o la viruela son algunas de las pandemias que ha habido a escala mundial. Ninguna de estas enfermedades representa ahora una amenaza para la humanidad, por lo tanto, podría pensarse que el coronavirus acabará de la misma manera. De hecho, algunos expertos ya señalan que podría acabar convirtiéndose en un resfriado.

Un año después de los casos de coronavirus, han surgido nuevas variantes que preocupan al científico por ser más infecciosas y algunas, como la sudafricana, hacen que algunas vacunas pierdan un poco de eficacia, aunque no hay investigaciones del todo concluyentes. Las mutaciones, sin embargo, son algo normal, según los científicos.

Nuevas pandemias

El coronavirus ha dejado entrever luces y sombras de los sistemas de salud. A pesar de todo, siempre hay un poco de esperanza. "Las pandemias no son un invento del siglo XXI, saldremos adelante. De una manera u otra, se acaban", explicaba este fin de semana el doctor Benito Almirante, jefe de Enfermedades Infecciosas del Vall de Hebron. Y tal como recoge un artículo de la BBC, durante años los epidemiólogos ya habían advertido de posibles pandemias mundiales.

Así, el mismo portal recoge que el 75% de las enfermedades emergentes provienen de animales, a consecuencia de nuestras propias acciones y efecto sobre el clima.

Impacto ambiental de la pandemia

Con el confinamiento total que hubo en muchos países el año pasado, se redujeron las emisiones de CO2 en un 6% el año 2020. Y aunque se han producido reducciones importantes, no se sabe todavía si este hecho podría tener algún impacto ni qué pasará después, cuando acabe la crisis del coronavirus. A estas alturas, es una incógnita saber si se volverá a los niveles anteriores o la crisis habrá provocado un cambio de chip.

¿Se acabará alguna vez el coronavirus?

Y eso hace pensar en el día que la pandemia llegue a acabarse. Una pregunta nada fácil de responder, cuando menos, para todos los expertos y científicos.

Para dejar de ser una pandemia, tiene que disminuir su alcance. Definir el umbral no es fácil. Por mucho que la OMS pueda verbalizar que se ha acabado la pandemia, serán los países los que determinarán las restricciones.

Tal como expone la misma cadena británica en otro artículo, la forma más clara de determinar que una pandemia se ha acabado es que no haya circulación del virus. Un objetivo todavía lejano.

Por ahora, es difícil encontrar países o localidades libres de virus. Incluso la Antártida registró casos. A pesar de todo, algunas islas siguen sin registrar casos de Covid.

 

 

Imagen principal: imagen ampliada del coronavirus / Flickr Niaid