Un médico del hospital de Wuhan ha dicho que él y sus compañeros de profesión sospecharon de la alta transmisibilidad del virus a principios de enero del año pasado, antes de que las autoridades chinas lo admitieran, pero que se les impidió avisar a nadie. Así lo habría explicado el mismo médico en un documental de la BBC sobre los 54 días entre el primer caso conocido de coronavirus y el cierre total de la ciudad de Wuhan. Esta revelación se suma a las informaciones que se han ido conociendo sobre los intentos de China para intentar esconder el brote del virus.

El hospital está cerca del mercado de Huanan, el que se cree que podría ser el epicentro del brote de coronavirus y que rápidamente se llenó de pacientes después de que se detectaran los primeros casos del virus en diciembre del 2019. El médico, anónimamente, ha explicado que el día 10 de enero el hospital ya estaba lleno. "El virus estaba fuera de control, empezamos a entrar en pánico", recoge el diario británico The Guardian.

Pero las autoridades del hospital prohibieron hablar con nadie y tampoco les permitían utilizar mascarillas. Según varios informes, más de 200 trabajadores del hospital sufrieron el virus. "Todos sabían que era una transmisión de persona a persona. Incluso un tonto lo sabría. Entonces, por qué decir que no había. Eso nos confundió y enfadó mucho".

El médico detalla a la BBC que en pocas semanas había centenares o miles de casos sospechosos, pero que no tenían manera de confirmarlos. De manera oficial, solo se habían notificado 41 casos.

Cuando se cerró la ciudad de Wuhan, el 23 de enero del año pasado, el hospital ya recibía cerca de 2.500 casos diarios, según resalta el diario británico.

Reacciones lentas

China ha negado cualquier acusación e insiste en que divulgó rápidamente toda la información relevante. Ahora bien, hay quien no solo señala al país asiático sino también la Organización Mundial de la Salud (OMS) y se insiste en que podrían haber actuado más deprisa para contener el inicio del brote de coronavirus, según ha expuesto un grupo de revisión independiente.

En su informe provisional dado a conocer la semana pasada, el grupo de preparación y respuesta a las pandemias, con sede en Suiza, ha determinado que Pekín habría podido ser más vigoroso a la hora de aplicar medidas de salud pública cuando se detectaron casos por primera vez en la ciudad de Wuhan.

Los primeros casos en Wuhan, hay que recordar, se produjeron entre el 12 y el 29 de diciembre del 2019, según las mismas autoridades de la ciudad. Pero no fue hasta el 31 de diciembre que se informó a la OMS. Cuando la ciudad china quedó cerrada el 23 de enero, el virus ya se había extendido por Japón, Corea del Sur, Tailandia y los Estados Unidos.

 

Imagen principal: miembros del personal sanitario hacen test masivos a la población de Shanghái para detectar casos de coronavirus / Efe