El Tribunal Supremo ha sentenciado, por tercera vez, contra el nombramiento de un cargo en el Tribunal de Cuentas, organismo que por primera vez en democracia está controlado por el PP y que se ha distinguit para perseguir el independentismo en los últimos años. Los tres consejeros de la comisión de gobierno son afines en los populares. El Supremo, según informa el digital Confilegal, ha anulado el nombramiento del subdirector técnico de la sección de Enjuiciamiento impulsado por el consejero José Manuel Suárez Robledano, presidente de esta sección, al considerar que se adjudicó la plaza con "una justificación inconsistente", favoreciendo a su candidato.

El conflicto viene de lejos. La plaza en cuestión estuvo ocupada en régimen de interinato durante dos años por Agustín Pérez-Cruz, a propuesta de Súarez Robledano. A finales del 2013 se convocó la plaza por el procedimiento de libre designación. Se presentaron 16 candidatos. El "elegido", según Confilegal, era ser Pérez-Cruz, pero este no se presentó y Suárez Robledano declaró desierto el concurso al considerar que ningún candidato cumplía los requisitos.

Primera sentencia en contra

La decisión fue recurrida ante el Tribunal Supremo por la Asociación de Cuerpos Superiores de Letrados y Auditores de los Tribunal de Cuentas, que dictó la primera sentencia contra el Tribunal de Cuentas al considerar que se había declarado desierto sin ninguna justificación y apuntaba que la elección estaba "capricho de quien tiene que hacer la designación".

El tribunal volvió a convocar la plaza, y esta vez sí que se presentó Pérez-Cruz así como la mayoría de los candidatos que lo hizo la primera vez, y fue el elegido. El nombramiento fue nuevamente recurrido y el Supremo lo volvió a anular. Entonces Suárez Robledano, en vez de escoger a cualquiera de los letrados que se presentaron a la plaza y que acreditaban años de experiencia en la sección de Enjuiciamiento, propuso José Manuel Alonso Núñez, que nunca había trabajado en Tribunal de Cuentas.

La resolución fue recurrida por uno de los aspirantes así como por la Asociación de Cuerpos Superiores de Letrados y Auditores de los Tribunal de Cuentas y el Supremo, por tercera vez lo ha anulado en una sentencia del 30 de abril pasado.