La prensa internacional sigue haciéndose eco del espionaje al independentismo. En un reportaje publicado este domingo por el rotativo británico The Guardian, el experto en ciberseguridad y director de Citizen Lab, Ron Deibert, alerta de que la magnitud del escándalo conocido como CatalanGate "ha catapultado a España a una crisis democrática y de seguridad nacional", que solamente se puede aclarar "con una investigación independiente". En la entrevista, el rotativo indica que, a pesar de la 'sustitución' de la exdirectora del CNI, Paz Esteban, "el escándalo se niega a desaparecer". "Cesar a la jefa de inteligencia me parece como nombrar un cordero para sacrificarlo", opina Deibert, y añade que la decisión del Ejecutivo de Pedro Sánchez "no responde a ninguna de las preguntas de quién compró el software espía, quién lo autoriza, cómo se justificaba ir detrás de personas que claramente no son objetivos legítimos para ningún estándar internacional razonable, y que implican violaciones flagrantes de los derechos de privacidad".

"Aparentemente democráticos"

Tal como ha explicado el experto en ciberseguridad que destapó el CatalanGate, "una sociedad aparentemente democrática" no es compatible con el espionaje a activistas y periodistas. Es por eso que no ha dejado de exigir que se abra una comisión independiente para aclarar los hechos. En la entrevista, Deibert opina que el descubrimiento que los teléfonos de la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el del presidente Sánchez, también han sido espiados, es otro argumento de peso más como para hacerlo. Con todo, el director de Citizen Lab se muestra incrédulo ante el inmovilismo en el Estado: "¿Qué está pasando? Si yo fuera ciudadano español, pediría que hubiera una investigación imparcial. Pero parece que quizás no pasará", lamenta, porque la gente lo ve como un "problema de Catalunya". En la entrevista, el experto se ha mostrado todavía más sorprendido "por la complacencia que vio" a pesar de la magnitud del escándalo, además de "decepcionado de que mucha gente del país parece que no tengan ningún problema con que se haya perseguido a los líderes catalanes".

Crisis democrática

Es esta falta de reacción, de indignación por una violación de derechos flagrante como esta, lo que desespera a Deibert. Según sus declaraciones, el experto no entiende que se intente normalizar este caso bajo el pretexto que se trata de independentismo catalán. Para Deibert, eso es algo irrelevante y va más allá del procés y de los líderes independentistas: nos encontramos ante una verdadera crisis democrática. "Para mí, lo que ilustra eso es que tienes esta tecnología de vigilancia extraordinariamente poderosa –y un mercado que lo está suministrando que casi no está regulado– utilizada por los gobiernos, como ilustra este caso, que son injustificables y tienen graves problemas a la hora de dar responsabilidades y que el público lo pueda supervisar. Y esta es realmente una crisis de democracia, así es como pienso, sobre España."