La Superliga europea no sólo se juega en el fútbol, se juega también y mucho a la política. Esta mañana la Moncloa ha dejado claro a través de un comunicado que no da apoyo a la iniciativa, el ministro del ramo, José Manuel Rodríguez Uribes, ha advertido de un posible choque de trenes y la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, ha recordado que el fútbol es mucho más que un juego y tiene un componente de "identidad" para mucha gente.

El responsable de la Liga, Javier Tebas, ha tildado directamente de "secesionista y elitista" la iniciativa de creación de una competición más allá del Estado español. El argumentario estaba cantado.

Desconexión

En Catalunya no ha habido una reacción pública por parte del Govern, a pesar de que entre los impulsores figura el FC Barcelona. La valoración más política ha llegado de la mano del conseller de Políticas Digitales, Jordi Puigneró, que ha considerado esta iniciativa como una manera más de desconexión del marco mental español. "Salir del marco mental del concepto liga española", ha argumentado el conseller a través de un tuit.

Puigneró ha replicado desde las redes a las voces que se han levantado en contra del proyecto y ha defendido la libertad de asociación de los clubs para jugar a la liga que consideren, lo cual representa "un principio básico de la democracia liberal".

Captura de pantalla 2021 04 19 en las 18.57.51

Imagen del tuit de Puigneró

El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, será el primer presidente de la Superliga, según se anunció en el comunicado en qué se dio a conocer la puesta en marcha del proyecto.

La Superliga europea, que cuenta ya con doce clubs fundadores que las últimas horas se han ido pronunciando públicamente, sustituirá la Champions, se jugará entre semana y asegura que no tiene que tener conflicto de intereses con las ligas nacionales, según sus impulsores.

No obstante, en contra de la iniciativa se han pronunciado no sólo las diferentes ligas europeas y la UEFA sino también el presidente de la República francesa, Emmanuel Macron, y el primer ministro británico, Boris Johnson, así como el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, entre otros.

 

En la imagen principal, estaldes en el Camp Nou / Europa Press