Este jueves continúa en la Audiencia de Barcelona el juicio contra el exconseller Miquel Buch por haber puesto escolta al presidente en el exilio, Carles Puigdemont. Esta segunda sesión del juicio se celebra después de que este miércoles, el intendente de los Mossos Antoni Rodríguez, que fue el instructor de la investigación al exconseller de Interior y al agente Lluís Escolà, haya admitido, este miércoles, que la contratación de Monaguillo como asesor de Buch fue legal y que no encontraron ningún acuerdo entre Buch y el presidente Carles Puigdemont porque Filtró, contratado por el Departamento de Interior, le hiciera de escolta al exilio, en Waterloo. La investigación policial se ha centrado en los tuits de Monaguillo sobre sus viajes al lado de Puigdemont, la comprobación de algunos vuelos, y 14 informes que entregó como a cargo de confianza de Buch de junio de 2018 a marzo de 2019, los cuales ha desacreditado.
- El investigador de los Mossos admite al juicio que no encontró ningún acuerdo de Buch i Puigdemont para su escolta
- Miquel Buch desvinculará al juicio la contratación de un mosso con la protección de Puigdemont al exilio
- Multitudinaria cena en apoyo de Miquel Buch, antes de ser juzgado por poner escolta en Puigdemont
Finaliza aquí el directo de ElNacional.cat, que se reprenderá este viernes.
Andreu Joan Martínez, Brauli Duart y Pere Ferrer han declarado ante la Audiencia que no sabían que Escolà iba a Bélgica.
Antiguos altos cargos del Departament d'Interior durante el mandato del conseller Miquel Buch han defendido el nombramiento del sargento de los Mossos d'Esquadra Lluís Escolà como asesor en materia de sistemas de seguridad. El exdirector general de la Policía, Andreu Joan Martínez, el exsecretario general Brauli Duart y el exjefe de gabinete y actual director de la Policía, Pere Ferrer, han explicado que Buch buscaba a un policía para que lo asesorara en materia de seguridad y no les extrañó que Escolà fuera el escogido.
Acaba la segunda jornada del juicio al exconseller a Miquel Buch y el escolta Lluís Escolà, acusados por la Fiscalía de una presunta malversación de fondos y de prevaricación para poner escoltas en Carles Puigdemont en Bruselas. El proceso judicial se reanudará mañana viernes 30 de junio.
La defensa de Miquel Buch hace un repaso por los informes autorizados por el jefe de gabinete. Pere Ferrer defiende la importancia de haber elaborado estos diversos informes que eran útiles para ayudar al conseller a hacer frente cualquier intervención en función de donde tenía que ir.
Pere Ferrer defiende la necesidad de los informes técnicos a los cuales está hecho referencia la defensa del exconsejero|exconseller Buch.
La defensa del conseller Buch pregunta sobre si los informes técnicos elaborados por Escolà. Hace un recorrido por alguno de los informes, y cuestiona si respondían alguna necesidad del conseller. Uno de aquellos son la alerta terrorista, Ferrer asegura que si era necesario, para tener elementos comparativos para dar una respuesta rápida.
Sobre la dimisión de Escolà, Ferrer afirma que los motivos personales que alegó para dejar el cargo le parecieron razonables al ser una persona que siempre ha estado al pie del cañón y pasa a hacer informes.
Pere Ferrer reitera que no tenía conocimiento de los desplazamientos que hacía Escolà, si acompañaba a Puigdemont. "El señor Escolà estaba disponible siempre que lo hemos necesitado".
Sobre el trabajo que llevó a cabo Lluís Escolà en el Departament y la solicitud de los informes, Ferrer detalla que el trabajo de asesoramiento tiene una parte recogida en informes, pero la disponibilidad es completa. "Como es un profesional que había trabajado en torno a la policía y también en el FC Barcelona, el conseller le pedía informaciones sobre cualquier cuestión". Con respecto a los informes que le hacía llegar Filtró, explica que lo hacían tanto por correo electrónico como en reuniones personales, pero el informe siempre llegaba al despacho del conseller.
Ferrer explica que el exconseller Buch quiso tener una persona que controlara la parte técnica del cuerpo policial y, por lo tanto, buscaba un perfil de policía. En más, detalla de lo que tenía constancia que algunos agentes utilizaban sus permisos para acompañar al president Carles Puigdemont.
El jefe de gabinete del exconseller detalla la creación de la nueva plaza de funcionario. Ferrer explica que el conseller reclamaba un perfil más técnico, y en el conjunto de voluntades que pedía el conseller se diseñó esta nueva plaza.
Pere Ferrer defiende que su gabinete no tiene ningún conocimiento en la designación de funcionarios. Es un trabajo que no nos corresponde, el gabinete está para las cosas que pueda necesitar el conseller.
Empieza a testificar el jefe de gabinete del l'exconseller de Interior Miquel Buch, cuando estaba en el cargo, Pere Ferrer.
El secretario general del Departament d'Interior en la fecha de los hechos que se juzgan, Brauli Duart, afirma que el nombramiento del escolta Lluís Escolà como a asesor en la conselleria de Interior de Buch no tuvo nada que ver con la negativa del Ministerio del Interior del Gobierno con ejecutar para Puigdemont el protocolo de seguridad que corresponde a los expresidentes, porque "la única vía era con las vías legalmente establecidas a través de los ministerios del Estado" y porque el nombramiento de Escolà fue antes de esta negativa de la Secretaría de Estado.
Preguntado por la defensa de los acusados, Brauli Duart justifica la elección del escolta de los Mossos Lluís Escolà como asesor de seguridad del Departament d'Interior porque su perfil era "perfectamente adecuado", por|para su "amplio conocimiento del cuerpo".
El secretario general del Departament d'Interior en la fecha de los hechos que se juzgan, Brauli Duart: "El equipo que configuró el señor Buch era con perfiles que habían tenido todos experiencia en Interior". Responde a los abogados de la defensa que no lo sorprendió "en absoluto" que el exconseller Miquel Buch escogiera un mosso, aunque los agentes y funcionarios con un cargo de asesor político quedan "señalados".
Brauli Duart asegura que el escolta Lluís Escolà estuvo como asesor de Miquel Buch siete meses y medio y que no tiene ninguna constancia de los viajes que hizo Monaguillo en Bélgica, porque los hizo "a título particular y no pidió nada al Departamento". También afirma que no tuvieron conocimiento de los tuits en Twitter de Monaguillo en donde explica que estaba en Bélgica con Puigdemont.
El secretario general del Departament d'Interior en la fecha de los hechos que se juzgan, Brauli Duart, asegura que vio al escolta Lluís Escolà en la sede de Interior, en dónde estaba su plaza como asesor de seguridad Miquel Buch, en numerosas ocasiones. También afirma que "el personal eventual - como Escolà- no ficha porque tienen la obligación de estar disponible las 24 horas".
"Miquel Buch quería un perfil que hubiera pasado por el cuerpo de Mossos d'Esquadra y sondeaba personas que conocía de su trayectoria político-personal", ha afirmado al secretario general del Departament d'Interior en la fecha de los hechos, Brauli Duart. Duart asegura que los agentes, funcionarios, normalmente no quieren acceder a este tipo de cargos para evitar ser asociados con la carga política que comporta y que Buch tuvo dificultados para encontrar a un candidato.
El secretario general del Departament d'Interior en la fecha de los hechos, Brauli Duart, explica que su papel en la plaza como asesor de seguridad que fue asignada al escolta de los Mossos sancionado Lluís Escolà fue aplicar las herramientas ordinarias del Departament y supervisar la creación de la plaza siguiendo las indicaciones que dio Miquel Buch. Inicialmente, la plaza era de comunicación corporativa, pero el exconseller Buch quería "un perfil de seguridad".
Brauli Duart, secretario general del Departament d'Interior en la fecha de los hechos, corrobora que en julio del 2018 Carles Puigdemont pidió activar el protocolo que le corresponde como expresidente, incluido el dispositivo de seguridad. Afirma, también, que al ser un dispositivo previsto fuera del territorio español corresponde coordinarlo con el Ministerio de Asuntos Exteriores del Gobierno, además del Ministerio del Interior. Duart asegura que tiene conocimiento que nunca ningún órgano ha expedientado a Mossos que estuvieran en Bélgica con Puigdemont, porque sería un incumplimiento del régimen de compatibilidades, y que no le consta que tuvieran escoltas del cuerpo.
Testifica ahora el secretario general del Departamento de Interior en la fecha de los hechos, Brauli Duart.
Preguntado por la defensa, Andreu Joan Martínez, exdirector general de los Mossos, afirma que los directivos del cuerpo y del ministerio del Interior no fichan nunca, porque no tienen horarios fijos.
El exdirector general de los Mossos, Andreu Joan Martínez, afirma durante las preguntas de la defensa que la sanción final a Lluís Escolà fue más dura que las medidas cautelares que le había puesto previamente la Secretaría de Estado y que la propuesta inicial de resolución del cuerpo. Escolà fue castigado con un traslado definitivo a la comisaría de Martorell, una sanción de pérdida del puesto de trabajo en el área de escoltas y la prohibición de presentarse a concursos públicos temporalmente.
Andreu Joan Martínez, exdirector general de los Mossos, afirma que no recuerda ninguna reunión formal con Lluís Escolà durante las funciones de este como asesor en el Ministerio del Interior de Miquel Buch, pero que recuerda verlo en la sede de Interior. También asegura que no tiene ningún conocimiento de que haya hecho viajes oficiales a Bélgica con el expresidente Puigdemont.
El juez hace da un toque de atención al fiscal por la insistencia en las preguntas a Andreu Joan Martínez y le inadmite una pregunta al considerar que pide opiniones personales.
Andreu Joan Martínez, exdirector general de los Mossos, afirma que le consta que se sanciona a Lluís Escolà de forma "grave" en el 2018 por cumplimiento irregular de sus obligaciones policiales y que aprobó la resolución pertinente en tiempos "ordinarios".
Andreu Joan Martínez explica que dirige una carta a la secretaria de Estado del Ministerio del Interior, a su "homóloga", como trámite formal para poner seguridad en Puigdemont, sin comunicarle a su superior, Miquel Buch: "Era una tramitación completamente ordinaria y no hacía falta".
Andreu Joan Martínez, exdirector general de los Mossos, afirma que tiene constancia de la petición formal del Department de la Presidencia de la Generalitat hacia julio del 2018 para activar el estatus de expresidente, con el servicio de seguridad que comporta, para Carles Puigdemont.
Se reanuda el juicio, con el testimonio del director general de los Mossos en la fecha de los hechos, Andreu Joan Martínez. El director general es quien tiene la dirección política del cuerpo policial.
Por un error de cálculo con los tiempos de los testimonios, que se esperaban más largos, según el tribunal, los siguientes comparecientes para testificar llegaran más tarde, así que el magistrado José Carlos Iglesias hace una pausa en el procedimiento judicial, que se reanudará en unos minutos.
El inspector de los Mossos asegura ante el tribunal que los asesores de los consellers, en carácter de urgencia, se pueden dirigir a su unidad para pedir informes policiales. También ha afirmado que no tiene ninguna constancia de que Lluís Escolà se haya dirigido en ningún momento a él o a su equipo para pedir informes. El jefe de gabinete de Miquel Buch, al contrario, sí los pidió. Acaba así su testimonio.
Testifica ahora un inspector de los Mossos d'Esquadra, responsable de tareas de coordinación, de análisis de información delictiva, documentación y recursos humanos. El último agente de la jornada, antes de la intervención de los altos cargos del Departament d'Interior.
El agente afirma que durante la etapa de servicio del acusado Lluís Escolà en el Departament d'Interior, por la cual se le acusa en este juicio, estaba fuera del cuerpo de Mossos, en excedencia, y sin su arma reglamentaria.
Es el turno del testimonio de un intendente de los Mossos d'Esquadra, que responderá a las preguntas de la Fiscalía y la defensa de los acusados.
El agente de los mossos no sabe concretar si el escolta acusado Lluís Escolà tenía una enfermedad que lo incapacitaba, pero le consta que "alguna incapacidad" sí que se le concedió. La abogada del señor Escolà, M. Isabel Elbal, le pregunta si el trabajo de escolta requiere esfuerzo físico que pudiera ser incompatible con la afección del señor Escolà. El agente admite que el trabajo sí que requiere esfuerzo. Acaba así a su testimonio.
El mosso jefe de operativo del expresidente Torra afirma que la presencia de Escolà en el acto con Puigdemont en Bélgica podría ser compatible con tareas de seguridad, aunque no puede asegurar nada.
El agente asegura que vio a Lluís Escolà en un acto con Puigdemont y Torra en Bélgica, pero no sabe concretar qué tareas hacía y asegura que el acusado al juicio no iba con su comitiva de seguridad.
Testifica ahora un sargento de los Mossos d'Esquadra que ha sido jefe del dispositivo de seguridad del expresidente Quim Torra.
En esta segunda jornada de juicio testificarán tres mossos de escuadra, un sargento, un intendente y un inspector del cuerpo; el director general de los Mossos en la fecha de los hechos, Andreu Joan Martínez; el secretario general del Departamento de Interior en la fecha de los hechos, Brauli Duart; y la jefe de gabinete de Miquel Buch cuando era conseller de Interior.
🔴 Empieza la segunda jornada del juicio al exconseller de Interior Miquel Buch, acusado de malversación de fondos y prevaricación para poner a un escolta en Carles Puigdemont en Bélgica. La Fiscalía pide 6 años de prisión y la inhabilitación como cargo público.
Miquel Buch antes de entrar en juicio este miércoles / Foto: Carlos Baglietto
La directora general de Función Pública en la fecha de los hechos que se investigan, Pilar Sorribas, aseguró ayer en sus declaraciones al tribunal que el trabajo de su organismo es asegurar que las funciones del personal eventual corresponda a las tareas que pueden desarrollar ("de asesoramiento o confianza, no funcionariales"), que los ingresos que recibirán sean adecuados y de acuerdo con los presupuestos y que no se supere el número de eventuales que puede tener cada departamento de la Generalitat. Sorribas asegura que la descripción que se hacía de las funciones que tenía que ejercer Lluís Escolà en la plaza que obtuvo en el Departament d'Interior como asesor de seguridad era correcta y que, por lo tanto, no la echó atrás ni puso ningún impedimento. También que el nombramiento de Lluís Escolà no supuso tampoco ningún incremento de presupuestos ni del límite de personal eventual permitido por cada departamento de la Generalitat, ya que se compensó eliminando dos plazas de funcionario.
El agente aseguró también que Escolà ayudó al expresidente Carles Puigdemont a salir del territorio y que eso le comportó un expediente disciplinario. Y se lo destina a la comisaría de Martorell, aunque no llega a ir para encadenar una serie de bajas. Según el intendente de los Mossos, durante el periodo del 155 en Catalunya, Escolà está en Bélgica protegiendo Carles Puigdemont, "tal como muestra la exposición pública que hace a su cuenta de Twitter".
El intendente de los Mossos al frente de la investigación sobre los hechos que se juzgan aseguró ayer ante el tribunal que el escolta acusado Lluís Escolà tenía una relación muy próxima y de confianza con Puigdemont y también una afinidad ideológica con el independentismo.
En esta segunda jornada de juicio testificarán tres mossos de escuadra, un sargento, un intendente y un inspector del cuerpo; el director general de los Mossos en la fecha de los hechos, Andreu Joan Martínez; el secretario general del Departament d'Interior en la fecha de los hechos, Brauli Duart; y el jefe de gabinete de Miquel Buch cuando era conseller de Interior. El juicio se reanudará a las 10.00 h de la mañana.
Lee aquí la crónica de la jornada de ayer miércoles del juicio al exconseller Miquel Buch para estar al día 👇
El investigador de los Mossos admite al juicio que no hay ningún acuerdo de Buch i Puigdemont para su escolta
🖋️ Por Mayte Piulachs
Numerosos dirigentes independentistas se concentraron este miércoles por la mañana a las puertas de la Audiencia Provincial de Barcelona para expresar su apoyo al exconseller Miquel Buch. Asistieron el secretario general de Junts, Jordi Turull; la presidenta de Junts, Laura Borràs; la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell; la cabeza de lista de Junts en Barcelona para el 23-J, Míriam Nogueras; y el exconseller Damià Calvet. También militantes de Òmnium.


Por su parte, la defensa del escolta de los Mossos Lluís Escolà, los abogados Isabel Elbal y Gonzalo Boye, también discrepan de la acusación y aseguran que Escolà fue jefe de operativo de escoltas de Puigdemont hasta octubre de 2017; fue contratado por Interior del 25 julio de 2018 a marzo del 2019, y obtuvo la baja laboral para ejercer de agente de los Mossos el 15 de julio de 2019 por una enfermedad en la columna vertebral.
Las defensas del exconseller de Interior Miquel Buch y el escolta Lluís Escolà niegan que hayan cometido ningún delito y piden su absolución. La defensa de Buch, ejercida por la penalista Judit Gené, sostiene que Lluís Escolà fue contratado a finales de julio de 2018 como a cargo de confianza de Buch, y que nada tiene que ver con el procedimiento iniciado en agosto de 2018 por la seguridad del expresidente Carles Puigdemont en el exterior.
La tesis acusatoria del teniente fiscal Pedro Ariche es que el exconseller Miquel Buch, concertado con Carles Puigdemont, encubrió la contratación de Lluís Escolà para que hiciera de escolta del expresidente, y sostiene que de los 224 días que estuvo de asesor, unos 103 fue fuera del Estado español, muchas veces -indica- al lado de Carles Puigdemont en Bruselas. La Fiscalía, para demostrarlo, aporta unos tuits del mismo Escolà en los cuales él, presuntamente, afirma que está en Bélgica.

La Fiscalía también pide 4 años y 6 meses de prisión y 13 años de inhabilitación al escolta de los Mossos Lluís Escolà como colaborador del exconseller Miquel Buch, al haber sido, según la acusación, escolta de Puigdemont en Bélgica.
Reanudamos el directo de ElNacional.cat para la segunda jornada del juicio al exconseller de Interior Miquel Buch, acusado de malversación de fondos y prevaricación por poner un escolta a Carles Puigdemont en Bélgica. La Fiscalía le pide 6 años de prisión y 27 de inhabilitación para ostentar un cargo público.
