A 24h para que arranque oficialmente la campaña de primarias en el Partido Popular este sábado, los principales candidatos han empezado a marcar perfil sobre el estilo de su ofensiva. María Dolores de Cospedal se ha abierto al choque directo hacia Soraya Sáenz de Santamaría, en un intento de hacer de la necesidad virtud, tras haber sido secretaria general del PP en los años de los casos de corrupción más sonados. A su vez, Santamaría sigue evitando todo reproche a su compañera de partido, aplicando la estrategia del abrazo del oso; es decir, la de fundirse con Cospedal para atraer el voto de la militancia indecisa.

"Prefieren a alguien que da la cara que a las personas que se esconden", dijo la exministra de Defensa sobre lo que a su parecer pedía la militancia y la ciudadanía española. Estas palabras eran un intento de deshacerse de aquello que ella misma reconoció como "perjuicio": las declaraciones en el atril de Génova donde habló de "el despido " en diferido del extesorero en la prisión Luis Bárcenas, entre otras ruedas de prensa demoledoras. Así y todo, se dijo muy "orgullosa" de su defensa, y apeló a todos aquellos que se habían visto "cohibidos y avergonzados por quienes habían manchado sus siglas".

El hecho es que el exdiputado del PP Jorge Trias Sagner, quien denunció el cobro de sobresueldos por parte de la cúpula del PP, expuso este jueves que creía que Cospedal nunca percibió cantidades, aunque señaló que la gestión que hizo como secretaria general fue "pésima". En este sentido, indicó que en la página en la cual aparecen anotaciones sobre la candidata, las pruebas periciales señalaron que se manipuló y se vio que los escritos eran posteriores al resto de apuntes. "Había un hecho evidente, Cospedal y Bárcenas se odiaban", recalcó.

Ahora bien, Santamaría evitó en paralelo entrar al juego, ante unas palabras que podrían buscar acusar de forma indirecta a la exvicepresidenta por haberse refugiado en la Moncloa en esos años. Al contrario, esta optó por enviar un mensaje a las bases con que ganarse a los posibles militantes indecisos entre ambas: aseguró que el minuto posterior a que Cospedal hipotéticamente ganara las primarias, ella estaría para darle apoyo y hacer todo el posible para que se convirtiera en presidenta del gobierno, "sin buscar ningún cargo" indicó.

La cuestión es que el exnúmero dos del Ejecutivo no parece dispuesta a entrar al juego de reproches con ninguno de sus oponentes y archienemigos. "¿Usted conoce Margallo, verdad? Pues ya está" ironizó en respuesta al periodista Carlos Herrera cuando este le preguntó qué conflicto mantenía con el exministro de Exteriores. Este sí ha sido tradicionalmente muy crítico con Santamaría y se burló públicamente que no le había "conocido" ningún proyecto, aunque ahora se presentara a liderar la formación. De esta manera, las primarias reabren las viejas tensiones del Consejo de Ministros.

Ante ese escenario, habrá que esperar al debate entre candidatos para observar si el exnúmero dos de la Moncloa se lanza al choque. Este viernes se producirá la proclamación de los candidatos y el sábado 23 de junio dará comienzo la campaña electoral, donde los participantes se muestran dispuestos a llamar puerta a puerta para ganar votos. Esta fase culminará el 5 de julio, cuando la militancia tome la decisión. El voto definitivo será el de los compromisarios, representantes electos que en la segunda vuelta escogerán entre los dos que superen la primera fase, hasta culminar el 20 y 21 de julio en el congreso.