El todavía ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha participado en su primer acto de campaña como candidato a las elecciones catalanas del 14 de febrero para el PSC. La puesta en escena ha tenido una característica esencial: el bilingüismo constante llevado al extremo de cambiar el idioma, de catalán a castellano y a la inversa, en menos de un minuto. De hecho, los primeros 40 segundos los ha hecho en catalán e inmediatamente ha pasado a hablar en castellano.

Este hecho va en concordancia con el mensaje más reiterado que ha dado sólo empezar: "Somos los de la política útil, de carne y hueso, la de gobierno por la gente. Todos somos conscientes de cómo ha estado de difícil para Catalunya estos últimos años. Hemos vivido una crisis de convivencia que todavía no hemos cerrado y lo tenemos que hacer lo más bien posible. Estoy para trabajar por el reencuentro de los catalanes y catalanas. Ha estado muy duro ver cómo las propuestas que teníamos para mejorar la vida han quedado tapados por el debate territorial, no nos escuchaban".

Añoraba a su familia

Se ha notado que tenía ganas de volver y estaba añorado, sólo empezar lo ha admitido: "Os he echado de menos, he pensado en Catalunya y vosotros durante este tiempo de distanciamiento. Ahora vuelvo a casa con mi familia y amigos y me siento orgulloso de ser del PSC, mi partido que ha sido un símbolo de resistencia y constancia. Como el único instrumento capaz de resolver el conflicto y garantizar la convivencia".

También ha sido curioso escuchar el acento en castellano: por una parte se le notaba su procedencia catalana y de la otra, ha marcado sin cesar, el fonema de la zeta castellana que, especialmente los hablantes del centro de España, tienen cuando pronuncian palabras que acaban con una 'd'. Una característica que a ningún catalán le sale de forma natural, como se puede escuchar, a modo de ejemplo, a partir del minuto 1'25".

En esta reivindicación del socialismo tal como lo entiende Illa también ha tenido unas palabras para diferentes miembros destacados: "Somos el partido de Pasqual Maragall, el mejor alcalde de Barcelona y un símbolo de modernidad. Somos el partido de José Montilla, el hombre tranquilo que estuvo en todas partes". Dos definiciones bien opuestas.

"Gracias Miquel"

Pero de quien tampoco se ha olvidado, ha sido de a quien ha desbancado en el liderazgo de estas elecciones: el actual secretario del PSC, Miquel Iceta. Un Iceta que lo tenía fachada, sentado en una silla y siguiendo su discurso que se ha pronunciado por todos los afiliados de forma telemática: "Gracias Miquel: eres firme, eres valiente y eres consecuente con los valores. Nunca te escondes y nunca te has escondido. Llegaste con la mirada limpia y sigues teniendo la mirada limpia y puedes mirar a Miquel en todos los ojos".

Este ha sido uno de los momentos más emotivos que ha abierto unos aplausos, entre los pocos asistentes, de forma improvisada.