Desde hace unas semanas, Alberto Núñez Feijóo hace campaña para intentar convencer a Pedro Sánchez de que acepte que tras las elecciones municipales y las generales que se esperan hacia finales de año, el partido más votado pueda ser el que gobierne. Esta propuesta, que en otros momentos y según sus intereses también ha planteado el actual presidente del Gobierno, ha sido mal vista por el resto de formaciones, pero desde el PP insisten en que es la mejor manera para evitar depender de socios indeseados, en el caso de Sánchez de Unidas Podemos y los independentistas, y en su caso de Santiago Abascal y Vox. Todo se entiende porque la inmensa mayoría de las encuestas sitúan los populares como partido más votado después de unas hipotéticas elecciones generales, aunque en las últimas semanas su crecimiento se ha estancado: el efecto Feijóo, que llegó ahora hace un año a Génova, ya no existe. El PSOE, sin embargo, no aprovecha este descenso, sino que los más beneficiados son Vox, que después de meses con poco empuje, ahora vuelve a recuperar votantes, según recoge una encuesta publicada por el diario El País.

Concretamente, en este inicio de año, el PP conseguiría 121 diputados en el Congreso, por los 89 que tiene actualmente, con un 28,7% de los votos. Mientras tanto, el PSOE bajaría hasta los 106, una quincena menos que los 121 con los cuales cuenta hoy en día en el parlamento español. Así, Vox es el único de los cuatro principales partidos que crece con respecto al último sondeo del mismo medio. En los últimos meses, el partido de ultraderecha había entrado en una espiral negativa, empujado por la llegada de Feijóo sustituyendo a Pablo Casado, las desavenencias internas, la derrota en Andalucía y la figura de su exlíder Macarena Olona. Todo provocó que sus perspectivas electorales se vieran drásticamente reducidas. En algún momento, se llegó a plantear un sorpasso de Vox al PP. Fue en marzo, cuando los populares tenían, según los sondeos, un 21,7 de los votos y los ultras un 19,2. A partir de aquí, los de Abascal fueron de bajada y tocaron fondo en noviembre, con un 12,8% de los apoyos, menos que los que obtuvieron en las elecciones del 10-N. Desde entonces se han ido recuperando y ahora se sitúan a un 14,9% con 46 diputados, todavía menos que hace tres años. En general, sin embargo, la unión del PP y Vox suma 167 escaños, cuatro más que ahora, pero que siguen siendo insuficientes.

Ciudadanos, rozando la desaparición en el Congreso de los diputados

Además, esta unión de la derecha no podrá contar con el apoyo de Ciudadanos, ya que después de su polémica refundación, que acabó con la lista continuista ganando el procés|proceso, sus perspectivas no mejoran y la encuesta todavía le da solo a un diputado. A las elecciones de abril del 2019, entonces liderados por Albert Rivera, los naranjas consiguieron 58 escaños. Pero meses más tarde, llegó la primera debacle y se situaron en solo 10. Con cuatro años de diferencia, han pasado de ser el tercer partido más votado a luchar por no desaparecer.

Por su parte, Unidas Podemos también se encuentra en un momento delicado, aunque estable. Esta encuesta le da un 11,5% de los apoyos, los mismos que consigue desde hace meses y que se traducen en 31 diputados, cuatro menos que los 35 que obtuvo en el 2019 y que le sirvieron para entrar al gobierno de coalición. El futuro del partido depende de si finalmente se integrará en la plataforma de la vicepresidenta Yolanda Díaz y también sobre como|cómo se gestionará la gran cantidad de rebajas de condenas a agresores sexuales que está provocando la Ley del Solo  sí es sí, de manera indeseada.

Otras encuestas con mejor resultado para la derecha

La de El País no es la única encuesta que se ha publicado este lunes. El Mundo también ha dado a conocer su sondeo que deja en mejor posición en el Partido Popular con un 31,1% de los votos y 133 escaños, mientras que el PSOE se sitúa en solo un 24,6% y 96 diputados. Además, en su caso, dan a Vox un 15% de los votos y 50 diputados, hecho que se traduciría en una mayoría absoluta de esta coalición de derecha y ultraderecha, que Feijóo quiere evitar a todo precio. La experiencia en Castilla y León no está siendo especialmente gratificante, con los ultras recuperando polémicas por|para temas como el derecho al aborto, que ya están superadas por buena parte de la población. Por su parte, Unidas Podemos apenas superaría el umbral del 10% de los votos y 24 escaños, totalmente insuficientes para revalidar la "coalición progresista" que ha ocupado la Moncloa en los últimos cuatro años.