El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha citado este viernes a su homólogo catalán, Salvador Illa, en el palacio de la Moncloa, en plena crisis socialista por el caso de corrupción de Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García. Tanto la Moncloa como la Generalitat enmarcan la encuentro —avanzada por La Razón y confirmada por ElNacional.cat— en la normalidad. "No hay nada extraordinario; los presidentes se ven y hablan a menudo", remarcan desde Palau. Fuentes del entorno del presidente Sánchez destacan en conversación con este periódico el contenido privado de la reunión, que se pactó este jueves y que ha durado alrededor de dos horas. Pero recuerdan que, tras la traición del exnúmero tres del PSOE, Illa es una de las pocas personas de máxima confianza para Sánchez, el barón socialista más importante y alguien con quien poder compartir inquietudes y debatir estrategias para superar la crisis: el presidente español prepara una remodelación de la ejecutiva del PSOE que anunciará en el comité federal del 5 de julio. Cuatro días después comparecerá en el Congreso de los Diputados para dar explicaciones sobre este escándalo. "Son amigos", insisten desde la sala de máquinas de la Moncloa.
Illa ha tenido que hacer hueco en su agenda para reunirse con Sánchez. Se esperaba que el president de la Generalitat asistiera a dos actos que no aparecían en su agenda pública, pero a los que sí que había confirmado hacer acto de presencia: no ha asistido ni a la entrega de diplomas de la promoción de Mossos d'Esquadra de este año a las nueve de la mañana, ni a la clausura de unas jornadas del Col·legi d'Economistes a la una del mediodía. Sánchez, por su parte, tenía vacía la agenda de esta jornada; no figuraba nada.
Es bien conocida la excelente relación que mantienen Sánchez e Illa. El actual jefe del ejecutivo catalán ejerció de ministro de Sanidad durante la pandemia del coronavirus. Vivió en el palacio de la Moncloa durante parte de aquel crítico año 2020, y los dos compartieron momentos cruciales. la Generalitat, se dejaron ver juntos en la isla canaria de Lanzarote; y los dos llevan en sus muñecas derechas la misma pulsera; de color rojo y formada por varias cuerdas. El entorno del president de la Generalitat explica a ElNacional.cat, sin entrar en ningún detalle, que se trata de una historia personal entre los dos. Ahora, hace poco más de un año, cuando estalló el caso Begoña Gómez, Illa fue de las pocas personas que consiguieron intercambiar algunos mensajes con Sánchez cuando este se clausuró en su residencia presidencial durante cinco días. Aquella carta y su amenaza de dimisión fake influenciaron completamente la campaña electoral con la que el PSC consiguió volver a entrar a Palau.
Financiación singular y gifactorías de inteligencia artificial, otras carpetas encima de la mesa
En cuanto a las carpetas que tienen que ver con la relación entre el Estado y la Generalitat, el acuerdo entre el PSC y Esquerra Republicana a cambio de la investidura del socialista catalán como president implicaba convocar antes de que acabe este mes de junio la comisión bilateral que tiene que abordar la puesta en marcha de la financiación singular. Por otro lado, después de la reunión, el Gobierno ha anunciado que presentará candidatura para que Móra la Nova (Ribera d'Ebre) acoja una de las Gigafactorías Europeas de Inteligencia Artificial, con una inversión de 5.000 millones de euros
Encuentro con Illa tras reunirse con Junts, ERC y el resto de socios
El encuentro entre Sánchez e Illa también llega después de que el presidente del Gobierno se reuniera en sus despachos con los líderes de las formaciones que votaron a favor de su investidura hace un año y medio. Así, esta semana han pasado por el palacio de la Moncloa el secretario general de Junts per Catalunya, Jordi Turull, y la líder de esta formación en el Congreso de los Diputados, Míriam Nogueras; así como el portavoz de Esquerra Republicana en esta cámara, Gabriel Rufián.
Con respecto a la formación de Carles Puigdemont, se tomó la decisión de dar aire a Sánchez, exigir el cumplimiento de los aspectos pendientes del Acuerdo de Bruselas y la colocación de un nuevo interlocutor que sustituya a Santos Cerdán, quien hasta hace una semana era secretario de Organización del PSOE y hombre de máxima confianza de Sánchez. Gabriel Rufián, por su parte, una vez terminada la reunión, hizo un llamamiento a las formaciones de izquierda a "aprovechar el tiempo que nos quede" de esta legislatura "para avanzar" en políticas sociales; fundamentalmente en la crisis de la vivienda. El republicano explicó que encontró un presidente "tocado" por el caso de corrupción que afecta al PSOE.
La Guardia Civil entra en la sede de Ferraz
Precisamente este mismo viernes, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha accedido a la sede del PSOE, en la madrileña calle de Ferraz, a petición del Tribunal Supremo, para clonar el correo corporativo de Santos Cerdán, investigado por cobro de comisiones de adjudicaciones por obra pública. Los agentes han acudido al cuartel socialista y a las instalaciones de ADIF y de la Dirección General de Carreteras para requerir la información que les ha solicitado el juez Leopoldo Puente. Fuentes del PSOE aseguran que el partido "colaborará con total transparencia" con la justicia.