El Parlament recibirá el miércoles a los exmiembros de la Mesa condenados por el TSJC por desobediencia. El presidente de la cámara, Roger Torrent, ha propuesto hacerles una recepción institucional y ha informado a los grupos durante la Mesa de este martes.
Esto pasa el día siguiente que el TSJC haya condenado a 20 meses de inhabilitación a los exmiembros de la Mesa del Parlament Lluís Corominas, Anna Simó, Lluís Guinó y Ramona Barrufet por haber desobedecido el Tribunal Constitucional (TC) al haber tramitado el año 2017 iniciativas parlamentarias a favor de la independencia y del 1-O vetadas por el tribunal. Tendrá que pagar una multa de 30.000 euros cada uno.
En cambio, el tribunal absolvió a la exdiputada Mireia Boya, argumentando que no fue advertida nominalmente por el TC y no ostentaba una posición de intervención en los hechos compatible con el tipo penal de la desobediencia.
La sentencia obliga a los condenados a pagar una décima parte de los costes procesales. El juicio se celebró los días 21,22 y 24 de julio del 2020. El tribunal estaba integrado por los magistrados Jesús María Barrientos, Jordi Seguí y Carlos Ramos, que ha actuado como ponente de la sentencia.
Imagen de la exdiputada Mireia Boya en el juicio contra la Mesa
Tanto los condenados como Boya recibieron el apoyo de todo el independentismo político, desde los exiliados hasta los presos políticos, pasando por los tres grupos parlamentarios. El mismo Torrent calificó la sentencia de "nuevo ataque al parlamentarismo". El president Puigdemont apuntó que "la represión toma formas cada vez más aberrantes".
La oposición, en contra
El líder de Ciudadanos en el Parlament, Carlos Carrizosa, ha criticado que se quiera hacer un "autohomenaje" y que "se utilice el Parlamento de todos para hacer una cosa que podrían hacer perfectamente en las sedes de los partidos". Por este motivo, ha anunciado que su grupo no asistirá.
De hecho, ayer la portavoz del PSC, Eva Granados, ya se pronunció de una manera similar, asegurando que "se habían saltado las leyes". Añadió que los miembros del PSC que formaron parte de la Mesa y la Junta de Portavoces "siempre intentaron de todas las maneras posibles que en aquella legislatura negra no se traspasaran las líneas de la legalidad".