Macarena Olona no se tiene que despedir de la carrera electoral. Así lo ha dictaminado la Junta Electoral de Granada, que ha rechazado la solicitud presentada por la coalición de izquierdas Andaluces Levantaos para impugnar la candidatura de líder de extrema derecha. La formación política aseguraba que era "público y notorio que la Sra. Olona no ha sido nunca vecina de esta comunidad porque no ha vivido de manera habitual a ninguno de sus municipios", requisito indispensable para contribuir a las elecciones andaluzas. A pesar de todo, la Junta Electoral ha considerado que no existe "obstáculo legal alguno" para la proclamación de su candidatura.

Mientras que desde la coalición de izquierdas andaluza se consideraba que Olona no cumplía el requisito de vecindad a la comunidad autónoma y afirmaban que era un "empadronamiento ficticio" en la localidad granadina de Salobreña. La Junta ha concluido: "El empadronamiento de la candidata Macarena Olona en el municipio (...) es un acto administrativo en firme (...). Esta Junta Electoral no encuentra ningún obstáculo legal para que la proclamación de la candidatura sea cuestionada".

 

La Junta ha considerado que las pruebas aportadas por Andaluces Levantaos no eran suficiente, incluso después de que la coalición anunciara este viernes que ampliaría la denuncia que formalizó contra la candidatura de Olona, con el informe policial del Ayuntamiento de Salobreña, en que no se pudo acreditar su residencia en este municipio y cuyo consistorio inició el procedimiento para darla de baja de oficio al padrón municipal, según recoje Efe. No ha sido bastante para la Junta, pero si para el Ayuntamiento, que el mismo viernes anuló el empadronamiento de la dirigente de Vox. En este sentido, la candidata ultra ha anunciado que presenta una denuncia contra la alcaldesa de Salobreña, María Eugenia Rufino Morales, por un presunto delito electoral de prevaricación administrativa y vulneración de los derechos fundamentales.

Victoria para Vox

Macarena Olona es una de las figuras más fuertes del partido de extrema derecha. Los últimos años ha ido cogiendo más protagonismos desde el Congreso y se ha hecho un rincón entre los dirigentes de la formación, con la particularidad de que ella es la única de la cúpula que no forma parte del corazón fundacional. Su candidatura le puede meter las cosas difíciles al actual presidente andaluz, el popular Juanma Moreno. Por eso, cuando las sospechas sobre su padrón empezaron a cernir, tan Olona como su partido se pusieron a la defensiva. Olona ha sostenido todo este tiempo que se trataba de una noticia falsa y también ha insistido en decir que: "Los andaluces nacemos donde queremos". Ella, concretamente, en Alicante. Mientras que Abascal ha llegado a afirmar: "Tienen miedo de que los andaluces escojan. Tienen miedo al cambio real".