La decisión de Felipe VI de no levantarse ante el paso de la espada con que Simón Bolívar liberó Colombia de los colonizadores españoles durante la toma de posesión de Gustavo Petro como presidente del país sigue trayendo mucha cola e indignación a las redes. Entre los perfiles que han denunciado la actitud del monarca destacan los del independentismo catalán y el president Pugidemont, que fue muy crítico como de costumbre con el Jefe de Estado, pero también con el de algunos ministros de Podemos, socio minoritario del gobierno español. Mientras tanto, sin embargo, la otra parte del Ejecutivo ha querido quitar importancia a este gesto deplorable y que deja en mal lugar a Felipe VI.

Iceta no cree que haya que disculparse

En primer lugar, ha sido el ministro de Cultura y Deportes Miquel Iceta, quien que ha reducido el hecho de que haya trascendido el vídeo de Felipe VI sentado mientras el resto de asistentes al acto se levantan derechos en señal de respeto por la simbólica espada a una "polémica de verano". Por todo ello, ha considerado un disparate que España tenga que disculparse por este gesto, algo que contrasta de lleno con la petición de la ministra morada Ione Belarra, que exigía un perdón. El catalán ha reiterado que la presencia de la espada fue una sorpresa, en tanto que el anterior presidente Ivan Duque no había permitido que estuviera presente, pero la primera orden de Petro fue irla a buscar, por el fuerte simbolismo que tiene para|por él este objeto. Por eso, Iceta ha apuntado que no formaba parte del protocolo y que estas cosas se acostumbran a avisar antes: "Yo no sé si pasa una espada por delante de mí si me levantaría o no, la verdad. Si me han avisado, puede ser sí", ha reflexionado. Pocas horas antes, Belarra ha denunciado que la actitud del Rey ha estado "inexplicable y merece una disculpa".

La polémica, un detalle menor

Iceta, sin embargo, no ha sido lo único que le ha querido sacar relevancia a esta cuestión que demuestra, una vez más, las diferencias entre los dos socios del Gobierno. También lo ha hecho el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. En su caso, ha rechazado criticar a Felipe VI, considerando que se trata de "detalles menores y sin demasiada trascendencia", que ensucian, según su opinión, una "nueva etapa de relaciones" con este país que ha cambiado totalmente de rumbo, ya que Gonzalo Preto es el primer presidente de izquierdas. "Creo que la solidez y la amistad entre España y Colombia es absoluta, como demuestra la delegación que España envió a la toma de posesión, encabezada por Su Majestad," ha dicho Bolaños, preguntado por la polémica. Hay que tener en cuenta que Casa Real compartió imágenes de Felipe VI y Preto, juntos y ajenos a la polémica.