José María Aznar da el pistoletazo de salida al curso político volviendo a la carga contra Pedro Sánchez. Después de un mes de agosto marcado por los incendios que han quemado más de 350.000 hectáreas en todo el Estado, la Fundación FAES, que está presidida por el expresidente del Gobierno, ha acusado al líder socialista de “descargar” sobre el Partido Popular la “incompetencia y esterilidad propias” frente a “catástrofes naturales, emergencias sanitarias o crisis energéticas”. “El Gobierno recurre siempre a lo mismo, la fabricación de chivos expiatorios”, denuncia la Fundación FAES, que cita como ejemplos el capitalismo, las empresas o la derecha. “Mucha propaganda y ninguna acción efectiva, como cuando arma emboscadas que llama pactos de Estado de la mano de notorios enemigos del Estado”, esgrime en una editorial publicada este lunes. De hecho, en este sentido, enfría la viabilidad del Pacto de Estado propuesto por Pedro Sánchez: “Los pactos de Estado exigen sentido de Estado, noción que en la ejecutoria de Sánchez tiene la sólida consistencia de los unicornios”.

“Esa concepción de la política como fábrica de relatos, pretexto para la manipulación emocional y técnica de asalto y ocupación del poder, tiene sus límites”, verbaliza FAES. “Los estamos tocando”, advierte. Y considera que, frente a los incendios de este verano, ha habido una “reedición del tópico sanchista sobre la cogobernanza inventado durante la pandemia”, que la FAES define como el “conocido método de chupar cámara y endosar culpas”. “Debería evitarse que cuando tanto campo español ha quedado reducido a cenizas, se pastoree a la opinión pública para azuzarla a debatir sobre el color de las responsabilidades sin antes haber aclarado las causas efectivas del daño, el volumen de sus consecuencias y el remedio mejor para prevenir unas y reparar las otras”, arguye. Y acusa a la Moncloa de dedicarse a “confundirlo todo, tirar de ideología y suscitar polémicas” frente a una “devastación ambiental” que tiene “consecuencias muy concretas que atender”.

Asimismo, reprocha al PSOE que convierta la polarización en el “procedimiento rutinario” de un Gobierno ensimismado en la gestión de su propia supervivencia”. “El combustible de esta legislatura es una mayoría parlamentaria aberrante, de signo puramente negativo; su comburente, las toneladas de sectarismo imprescindibles para que el engendro sea funcional y su energía de activación, la polarización inducida”, apostilla.

“Se juega con fuego cuando se da pábulo a discursos que predican el fracaso del estado autonómico”

Por otro lado, la Fundación FAES lanza un dardo a Vox: “La polarización inducida desde el poder es pésimo negocio”. El think tank de José María Aznar considera que este camino “siempre acaba engordando a la antipolítica” y a los que “no distinguen niveles competenciales ni colores partidarios” y para quienes el sistema “está ya sentenciado”. “Se juega con fuego cuando se da pábulo a discursos que predican el fracaso de las instituciones, del estado autonómico, del 78 atizando indignaciones comprensibles hasta cierto punto, pero que, en todo caso, una política responsable tiene el deber de encauzar productivamente para depurar procedimientos, sustanciar responsabilidades o planificar mejoras”, remacha. “El incendio político español no lo apagarán quienes soplan sobre cualquier rescoldo para avivar una tensión que necesitan. Y esto incluye al Gobierno, a sus socios y también a una derecha populista demasiado cómoda en un clima que amenaza volatilizar la convivencia”, concluye.