La salida de Juan Marín, que había sido el líder del partido en Andalucía y vicepresidente del gobierno andaluz antes de la mayoría absuelta de Juanma Moreno, todavía escuece. Aunque en las últimas semanas los naranjas se han acostumbrado a que los militantes abandonen el barco, en su caso fue la dirección quien lo echó después de la derrota del partido a las elecciones del pasado mes de junio. Ahora, después de semanas de silencio, ha decidido cargar muy duramente contra la cúpula de su ya expartido, concretamente contra la presidenta Inés Arrimadas, que muchas personas consideran que se está aferrando al cargo y destruyendo lo poco que queda de la formación. Aunque no ha dicho su nombre ni el de ningún otro compañero, Marín ha lamentado que "hay tres ignorantes de turno al partido que están llevando al partido a la ruina", que Ciudadanos no puede sacarse de encima.

En una entrevista muy dura en Efe, Marín ha lamentado que desde que lo hicieron abandonar el partido para convertirse en presidente del Consejo Económico y Social de Andalucía, no ha recibido ninguna llamada desde Madrid. En aquel correo electrónico en que explicaba que su baja no fue por voluntad propia, sino por instrucciones basadas en la incompetencia de la dirección. "Los mediocres siempre intentan sacarse de encima a quien realmente hemos hecho alguna cosa para el proyecto", ha dejado caer. Aunque no fue Inés Arrimadas quien le preguntó quién abandonara el partido, sino el secretario de Organización, Carlos Pérez-Nievas, el exvicepresidente andaluz cree que la presidenta del partido tendría que asumir su responsabilidad y haber hablado con él sin intermediarios y con normalidad. No fue así, y Marín cree que la líder naranja "insulta a la inteligencia" cuando horas después dijo que desconocía si seguía estando afiliado o no.

Villacís, de las pocas que se salvan

Una de las pocas personas de la primera línea del partido que lo defendieron fue la portavoz y vicealcaldesa en Madrid, Begoña Villacís, que también se han llevado bofetadas de estos "tres o cuatro ignorantes", como define a los cargos del partido que lo están hundiendo. Villacís tiene todavía buena relación con Marín, que lamenta que a la madrileña le están haciendo "lo mismo que él". En la misma línea que se han expresado los rebeldes del partido sobre la remodelación fake de Ciudadanos, Juan Marín cree que esta no servirá de nada, comparándolo con los equipos de fútbol: "Estos no cambian de escudo o de nombre, sino de presidente, entrenador o jugadores".

Ahora mismo, según Marín, las grandes deficiencias de Cs son la organización, la comunicación interna y la implantación territorial, una situación muy complicada y que tardará en resolver, si es que lo consiguen. El exvicepresidente andaluz ha dejado claro que ya no tiene ninguna comunicación oficial con su partido, más allá de los muchos mensajes que recibe de compañeros, pero como amigos: "Nadie me ha llamado y yo no llamaré a nadie".