Una encuesta ha sido suficiente para que el pánico se haya apoderado de Ciudadanos ante el posible auge electoral de una candidatura de la llamada España Vaciada, aquellas regiones del Estado que siempre han sido olvidadas desde Madrid y que poco a poco, se van quedando sin habitantes y se ven abocadas a la desaparición. Ayer, una encuesta del diario El Español, la primera que preguntaba por este partido que se registró en septiembre, ya le daba 15 escaños en el Congreso de los Diputados, convirtiéndolo en decisivo. Este hecho ha provocado que se enciendan todas las alarmas de Ciudadanos, que ya ha pedido que haya una reforma electoral para evitar que eso pase. Son el único partido que se ha mostrado preocupado por esta irrupción.

Teruel Existe, la formación que consiguió un escaño defendiendo los intereses de la provincia aragonesa, una de las más representativas de la España vacía, fue pionera. Su voto resultó clave para investir a Pedro Sánchez como presidente del gobierno de coalición, entre presiones de la derecha. Ahora, el partido La España Vaciada conseguiría 15 escaños en la Cámara Baja, presente en hasta 15 provincias y con solo el 1,1% de los votos. Estos irían en detrimento del PSOE, que según la encuesta perdería 5 y el PP, que perdería 6. Los 3 restantes los perdería Vox. Pero ni populares ni socialistas se han mostrado preocupados por esta irrupción.

"No pueden decidir"

Ciudadanos, con quienes esta última encuesta se muestra un poco más benevolente y le concede dos escaños, teniendo en cuenta que otros auguran su desaparición o reducen su representación a tan solo uno, han reaccionado pidiendo que se haga con urgencia una reforma de la ley electoral. Según ha defendido Edmundo Bal, el portavoz del partido, en declaraciones a El Español, esta es tan necesaria porque no puede ser que Teruel Existe necesitase 19.000 votos para tener un escaño, y Más País, el partido de Íñigo Errejón 190.000, "diez veces más".

Además, Bal cree que con esta fuerte entrada de La España Vaciada "se pervertiría el principio de objetividad que tiene que regir las decisiones políticas", ya que "no puede decidir gobiernos, inversiones y políticas generales".

A pesar de esta demanda de reformar la ley electoral para reducir su presencia en el Congreso de los Diputados, según ellos que estén sería una "perversión del sistema", Ciudadanos dice ser comprensivo ante la aparición del movimiento, ya que es la rebelión de los votantes de unas provincias que "el bipartidismo siempre ha marginado, porque tienen una bolsa pequeña de votos y dan poca rentabilidad electoral".

15 provincias, 15 escaños

Según esta encuesta, la formación podría obtener un escaño en 15 provincias de diferentes comunidades autónomas, especialmente de Castilla y León. Estas son Zaragoza y Teruel (Aragón), Badajoz y Cáceres (Extremadura), León, Zamora, Ávila, Segovia, Palencia, Burgos, Salamanca y Soria (Castilla y León) y Lugo, la única de Galicia. Estos 15 escaños les permitirían tener un grupo parlamentario propio y más numeroso que formaciones como ERC, Junts o Ciudadanos.

Desprecio

Mientras Ciudadanos ha entrado en pánico, los dos partidos más afectados han visto con indiferencia e incluso desprecio este auge. Según explican desde el PP, en la España vacíada no han notado que haya movimientos hacia esta formación en pueblos y ciudades de estas zonas más afectadas por la despoblación. Por su parte, desde el PSOE insisten en que su plan de recuperación llegará también a zonas rurales.

Desde Vox creen que el partido La España Vaciada sería una "nueva muleta de Sánchez" sin aclarar si estarían dispuestos a cambiar o no la ley electoral. En este sentido, desde de Unidas Podemos creen que con el nuevo movimiento, aunque en él habrá formaciones de derechas y de izquierdas, comparten algunas reivindicaciones. Además, destacan que en estas provincias, su aparición no provocaría ningún daño electoral, ya que el bloque más afectado sería el de la derecha, PP y Vox perderían nueve escaños por tan solo seis del PSOE.

En la imagen principal, la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, interviene en el Congreso de los Diputados / Europa Press