Nuevos comicios a la vista en el Estado español. Castilla y León celebrará elecciones el domingo 15 de marzo del 2026, siempre que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no sorprenda adelantando las elecciones generales. La fecha de las elecciones en esta comunidad autónoma, bajo poder del PP, la ha anunciado este martes el secretario autonómico popular, Francisco Vázquez, antes de participar en el Comité Ejecutivo Provincial del partido de Palencia. Vázquez ha avisado de que en caso de haber un adelanto electoral en todo el estado, la comunidad haría coincidir la fecha de los dos comicios, según ha informado la agencia Europa Press. El presidente del Gobierno, que pasa por un momento crítico a causa del asedio judicial al cual se ve sometido, siempre ha defendido que no tiene ningún tipo de intención de avanzar la convocatoria electoral. El líder del PSOE ha mostrado su disposición de resistir en el cargo hasta el 2027, fecha en la que expiraría la actual legislatura.
El actual presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, afrontará sus terceros comicios consecutivos como cabeza de lista solo seis meses después de haber tenido que hacer frente a una de las mayores crisis de incendios de la historia, donde fue duramente criticado por su mala gestión de la emergencia y acusado de “descoordinación” y “falta de medios”. Miles castellanoleoneses salieron varias veces a la calle a manifestarse para pedir la dimisión del presidente Mañueco y exigiendo responsabilidades al gobierno autonómico. “El humo no tapa vuestra incompetencia”, “un euro de prevención, 100 ahorrados en extinción”, “más bomberos y menos consejeros”, “Castellano y León quemada por la junta”, fueron los lemas más repetidos durante los días que los incendios asediaron la península Ibérica.
Fernández Mañueco, presidente de Castilla y León desde julio del 2019, gobernó su primera legislatura en coalición con Ciudadanos (a quien acabó expulsando a las postrimerías del mandato) y la segunda con Vox, partido que decidió romper todos los pactos con el Partido Popular en julio de 2024 por una estrategia nacional de Santiago Abascal. En aquel momento, el vicepresidente autonómico, Juan García-Gallardo, de Vox, renunció a su cargo al ejecutivo y Mañueco pasó a gobernar en solitario y en minoría. A pesar de que en los últimos comicios Fernández Mañueco obtuvo los peores resultados del PP en Castilla y León —comunidad que gobiernan desde 1987—, las últimas encuestas (cocinadas antes de la crisis de los incendios) apuntan que los populares volverían a ganar las elecciones autonómicas con entre 35 y 38 diputados en un parlamento donde la mayoría se sitúa en los 41.