El Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) ha dado un plazo de quince días al Parlamento Europeo, hasta el 15 de octubre, para que presente sus observaciones en relación a la demanda de medidas cautelares que ha presentado al president en el exilio, Carles Puigdemont. El político catalán ha pedido este viernes al TGUE que se le devuelva la inmunidad como eurodiputado de forma cautelar para evitar una nueva detención.
El 30 de julio el TGUE decidió que no había un riesgo de detención urgente que justificara las medidas cautelares y había levantado la suspensión que había dictado el 3 de junio sobre el suplicatorio aprobado por el Parlamento Europeo contra los tres eurodiputados de Junts, Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí.
Según argumentó el Tribunal, el Estado español había indicado que las euroórdenes no estaban activas porque el juez instructor Pablo Llarena ha presentado unas cuestiones prejudiciales sobre la decisión de Bruselas de no aceptar la orden de extradición de Lluís Puig, lo cual congela el proceso de las órdenes de detención.
Puigdemont ha presentado este viernes una petición de medidas cautelares al Tribunal General de la UE / ACN
Este pronunciamiento de Tribunal General de la UE permitía a los tres eurodiputados salir de Bélgica e ir a Estrasburgo para poder participar en los plenos del Parlamento, pero también les daba libertad de movimiento por toda Europa. De hecho, los tres han estado este verano en la Catalunya Nord y Puigdemont viajó a París a mediados de septiembre.
No obstante, el pasado 23 de septiembre Puigdemont fue detenido cuando viajaba al Alguer y tendrá que volver este lunes para comparecer en la vista del Tribunal de Apelaciones de Sassari.
Al saberse que había sido detenido en el Alguer, desde el Tribunal Supremo se reconoció que la euroorden nunca había dejado de estar activa. Además, este jueves el juez Llarena ha enviado un oficio al tribunal italiano en que asegura que el euroodre está activa y no ha quedado suspendida por haber planteado cuestiones prejudiciales.
Este posicionamiento de Llarena entra en clara contradicción con la comunicación que hizo el Abogado del Estado en nombre del Estado español, donde aseguraba que la euroorden quedaba congelada y, por lo tanto, el TGUE ha perdido el argumento clave para la decisión de desestimar las cautelares que reclamaba Puigdemont.
El abogado de Puigdemont, Gonzalo Boye ha argumentado la decisión de pedir de nuevo medidas cautelar ante la constatación de que "no existe voluntad por parte del juez Llarena de garantizar los derechos de los eurodiputados Puigdemont, Comín y Ponsatí".
La petición de Puigdemont al TGUE obligará al Parlamento Europeo a posicionar de nuevo y hacerlo después de que uno de sus miembros ha sido detenido cuando desde Luxemburgo se había asegurado de que este riesgo no existía.
En la imagen principal, Carles Puidgemont en la tribuna del Parlamento Europeo / Efe