Las polémicas en el Parlament no paran de resonar. Prejubilaciones de oro para funcionarios, trienios, dietas sin justificación... y ahora una nueva cuestión: el hijo de la secretaria general del Parlament ha conseguido una plaza interina de ujier. La Mesa del Parlament lo nombró el martes pasado, sin saber que se trataba del hijo de Esther Andreu, ya que esta no advirtió al organismo de un eventual conflicto de intereses durante todo el proceso de selección en el cual su hijo ganó la plaza, según explica la agencia Efe, que ha hablado con varias fuentes de la Mesa que aseguran que desconocían la relación de parentesco entre la máxima responsable de la administración parlamentaria y uno de los concurrentes en el proceso selectivo. En un comunicado remitido a la prensa esta tarde, el Departamento de Comunicación del Parlamento ha asegurado que "la secretaria general no ha participado ni directa ni indirectamente en el proceso de selección", y que antes de constituir la bolsa de trabajo, ya "manifestó que, dada la carga de trabajo, se inhibía de cualquier participación en el proceso selectivo".

Andreu es la mano derecha de Laura Borràs, pero a pesar de eso fuentes de presidencia del Parlament han asegurado que la presidenta conoció a posteriori esta relación familiar, y reconocen que no se informó al resto de miembros de la Mesa, aunque defienden que Andreu no tomó ninguna decisión en relación con esta selección de personal interino. Este episodio llega en un momento en que Andreu ya está muy cuestionada dentro de la cámara por su actuación en relación con las licencias de edad o la retirada del escaño al cupaire Pau Juvillà.

La ley 40/2015 de Régimen Jurídico del Sector Público establece en su artículo 23 que las autoridades y el personal al servicio de las administraciones "se abstendrán de intervenir en el procedimiento y lo comunicarán a su superior inmediato" cuándo haya "parentesco de consanguinidad dentro del cuarto grado" con alguno de los interesados. La obligación de comunicar una situación "a los organismos jerárquicamente superiores" queda justificada en el tercer punto del mismo artículo de la norma, que indica que estos podrán ordenar a la persona afectada "que se abstengan de cualquier intervención en el expediente".

Andreu participó en la selección

No obstante, varias fuentes de la Mesa aseguran que la secretaria general no informó de esta circunstancia en ningún momento del proceso, ni siquiera el martes pasado, cuando se formalizó que una de las cuatro plazas interinas disponibles sería para el hijo, que ocupa la cuarta plaza en la bolsa resultante del proceso de selección. Aunque Andreu no formó parte del tribunal que evaluó a su hijo, sí que participó en la selección de este, dado que las bases de la convocatoria dicen que "la comprobación y valoración de los conocimientos y méritos de los aspirantes de la bolsa corresponden a la comisión técnica de evaluación", formada por tres miembros entre los cuales "la secretaria general o el funcionario en quien delegue". Además, ejerció como a asesora jurídica en las reuniones de la Mesa en las cuales se adoptaron decisiones vinculadas a proceso de selección.

Estas mismas fuentes de la Mesa cuestionan "la ética y la estética" de la actuación de la secretaria general, pues al no comunicar su parentesco y formalizar su desvinculación completa del proceso, no hay garantías que no haya usado sus conocimientos para favorecer a su hijo, que fue el aspirante que obtuvo una mejor nota en la prueba teoricopráctica.