El diálogo entre la Moncloa y el gobierno de la comunidad de Madrid, presidido por Isabel Díaz Ayuso, no funciona. Ningún miembro del Gobierno de Pedro Sánchez ha hecho acto de presencia durante la toma de posesión de la presidenta madrileña.

Falta de entendimiento

En el 2019, en la primera toma de posesión de Ayuso a la Comunidad de Madrid, tan solo fue en representación del Gobierno la ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado. Esta vez solo ha hecho acto de presencia la delegada del Ejecutivo en la Comunidad, Mercedes González. Normalmente es el ministro de política territorial, Miquel Iceta, quien acude a estos actos, pero no se lo ha visto.

Este hecho evidencia una falta de diálogo entre el Gobierno y la presidencia de la Comunidad de Madrid, rompiendo la tradición de asistir a la toma de posesión de la comunidad central del estado español. Desde Génova se mostraron extrañados por la falta de representación del Ejecutivo español, "que menos que un ministro de jornada". Ayuso le ha restado importancia y ha asegurado que para ella era más importante el hecho de que representaba ser reelegida.

La toma de posesión

Así pues, Ayuso ha sido reelegida después del adelantamiento electoral, que convocó después de la moción de censura de PSOE y Cs a Murcia. Hace dos años, en el 2019, la candidata del PP consiguió gobernar sin haber ganado las elecciones en coalición con Cs, que esta vez no ha obtenido representación. La coalición PP-Cs también obtuvo el apoyo de Vox en la investidura. El nuevo mandato de Ayuso sólo durará dos años, ya que, a pesar del adelantamiento electoral, habrá de nueve elecciones autonómicas en el 2023.

La falta de empatía entre el ejecutivo de Sánchez y la presidencia de Madrid se hizo más evidente cuando Ayuso dedicó gran parte de su discurso de investidura como presidenta madrileña a cargar contra el Gobierno. Incluso aprovechó el debate sobre los indultos a los presos políticos independentistas, una medida de gracia que ha calificado de "ilegal e inmoral".

El PSOE contra Ayuso

El ministro de Política Territorial y Función Pública, Miquel Iceta, también avivó el fuego entre Madrid y la Moncloa, este lunes pasado en una entrevista en RAC1, valoró las palabras de Isabel Díaz Ayuso en las que situaba el Rey en el centro de la diana. Para Iceta, las declaraciones de la presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid —en las que se preguntaba si el monarca firmaría los indultos y si Sánchez "lo haría cómplice"— "pueden erosionar la figura del Rey porque a él no le corresponde opinar, sino que su prerrogativa constitucional es sancionar y firmar aquello que emana del poder ejecutivo o legislativo". En este sentido, el primer secretario del PSC quiso apelar a los "dirigentes del Partido Popular" y espera que no sigan el postulado de Ayuso sobre el papel del Rey en los indultos.

Imagen principal: Isabel Díaz-Ayuso al ser investida como presidenta de la Comunidad de Madrid.- EFE