Dolors Sabater está ingresada en el Hospital Municipal de Badalona después de dar positivo en Covid-19. La diputada y cabeza de lista de la CUP por Barcelona ha informado de su estado de salud a través de Twitter, desde donde ha agradecido también el trabajo del personal sanitario y del sistema de salud pública.

"Estos días no puedo seguir el trabajo político y público como es debido, porque tengo que hacer frente, como tantos otros millares de personas, a la Covid-19. Estoy en el hospital y quiero agradecer el trabajo al personal de todo el ámbito sanitario y a todo el sistema de salud pública, ¡estamos en buenas manos!", ha escrito Sabater. El motivo del ingreso de la exalcaldesa de Badalona es la necesidad de oxígeno.

 

TUIT Dolors Sabater

Dolors Sabater/Twitter

Sabater no es la primera política que se tiene que apartar de la mesa de negociación a raíz de la Covid-19. Hace dos semanas, Elsa Artadi, vicepresidenta de Junts, y Albert Batet, presidente del grupo, tuvieron que aislarse después de ser contacto estrecho de un positivo por coronavirus y no pudieron asistir a la segunda votación por la investidura de Aragonès.

Los datos facilitados hoy por Salut muestran que los nuevos positivos y los ingresos en las UCI por Covid-19 continúan subiendo, así como la positividad de las pruebas, que ya se acerca al 8%. En cuanto a los ingresos, bajan respecto a los de ayer. Salut ha notificado un total de 1.709 (3 menos). Los pacientes de UCI suben, de 458 a 483, veinticinco más.

Sabater, de baja en plenas negociaciones

Se han escrito ríos de tinta sobre la posibilidad de que, por primera vez en la historia y como ya ha pasado con la Mesa del Parlament, la CUP entre a formar parte del Govern de la Generalitat de la mano de Esquerra Republicana. Los anticapitalistas se prestan a dar el salto, pero sin precipitarse. De momento, "no se dan las condiciones", ha reconocido la diputada en el Congreso Mireia Vehí en una entrevista en RTVE.

lagar zapatero aragones acn

Dolors Sabater amb Pere Aragonès ACN

Después de una década de experiencia en la oposición, los cupaires han adoptado esta legislatura una actitud proactiva ya desde un principio. "Nosotros no seremos un problema", afirman. Ellos han sido los primeros en sellar un pacto con ERC para facilitar la investidura de Aragonès. Ahora bien, a pesar de estar satisfechos, tienen claro que "el acuerdo no es lo bastante profundo para que entremos en el gobierno". Su aspiración es mejorarlo y, sobre todo, comprobar que los republicanos no se desdicen. Por eso se incluye una cuestión de confianza a medio mandato de Aragonès.