Un desbarajuste penoso se ha producido en Extremadura, después de que se ha vacunado con AstraZeneca a personas menores de 60 años, lo que desaconsejan las autoridades sanitarias. Casi un centenar de policías, guardias civiles y profesores han recibido "por error" la vacuna de AstraZeneca cuando se esperaba que recibieran la dosis de Moderna.

La decisión de reservar AstraZeneca a partir de los 60 años, es porque en personas mayores se han encontrado un número irrisorio de casos de coágulos o trombosis, en contraste con los jóvenes, especialmente mujeres.

Los vacunados fueron el miércoles al Palacio de Congresos de Cáceres pensando que se les vacunaría con Moderna, pero una confusión hizo que se les suministrara AstraZeneca. La Junta de Extremadura, gobernada por el PSOE, ha afirmado que todo ha sido por un "error humano", y el gerente del área de Salud de Cáceres, David Zambrano, ha hablado de "incidente".

"Todas las personas vacunadas están localizadas, hemos contactado con ellas y les haremos un seguimiento de al menos una semana", han indicado desde los servicios médicos extremeños. El consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, ha pedido disculpas a los afectados, y ha agradecido el trabajo del equipo de vacunación que trabajaba cuando se produjo este "incidente", por "seguir los controles y darse cuenta de la administración de la vacuna para informar y tranquilizar a los afectados".

Mientras tanto sigue la incertidumbre sobre si los vacunados de AstraZeneca pueden recibir una vacuna diferente como segunda dosis. El ministerio de Sanidad decidirá la próxima semana, si lo recomienda.

Los estados de la Unión Europea habían empezado conjuntamente la vacunación con AstraZeneca. Sin embargo, ante las paradas y obstáculos para las nuevas informaciones que iban surgiendo, cada territorio ha hecho su camino: Dinamarca ha suspendido definitivamente el suministro, Alemania ha decidido combinarla con dosis de otras vacunas y otros países siguen como si nada hubiera pasado.

Sea como sea, Europa no renovará el contrato con la farmacéutica y ahora el gran interrogante es qué hacer con las personas que ya se habían vacunado con una primera dosis de AstraZeneca.

Varios especialistas consultados por este diario apuntan que existen diferentes estrategias: seguir con normalidad, que los pacientes se queden finalmente sólo con una dosis puesta, esperar meses a poner la segunda dosis a fin de que la vacunación avance, o poner una segunda dosis que sea de Pfizer o Moderna.