La detención de Puigdemont en Alemania y las de sus acompañantes —dos mossos fuera de servicio y el historiador Josep Lluís Alay— habrían estado rodeadas de anomalías. Cuando menos, así lo sostiene el abogado del president Puigdemont, Jaume Alonso-Cuevillas, que ha denunciado la existencia "de irregularidades" tanto en la detención del jefe del ejecutivo el domingo pasado como en el arresto de las personas que lo acompañaban en las últimas horas.

"Todo es el mismo despropósito, tanto desde el punto de vista jurídico como desde el sentido común", ha apuntado Cuevillas con contundencia. En declaraciones en El Món a Rac1, el abogado de Carles Puigdemont ha asegurado sin titubear que las personas que acompañaban al cabo del Ejecutivo no han cometido ningún delito y, de hecho, se ha mostrado derribado por el hecho que la Policía Nacional, según ha relatado el abogado, no los expuso los cargos de que se los acusaba.

Jaume Alonso-Cuevillas / ACN

Jaume Alonso-Cuevillas en el pleno del Parlament de este miércoles / ACN

Sobre la detención de Puigdemont en Alemania, Cuevillas ha hablado sobre la presencia del polémico geolocalizador con el que el el CNI habría seguido el coche del president para rastrearlo y facilitar su detención. Según el abogado de Puigdemont, el geolocalizador sería otra irregularidad que incluso podría llegar a invalidar la propia detención.

Entre otras anomalías, el abogado también ha denunciado que los servicios secretos daneses están molestos por el hecho de que España no los avisara de que el CNI trabajaría en territorio danés. En la misma línea, ha considerado que el Estado ha practicado el forum shopping, es decir, ha escogido la jurisdicción que mejor le ha ido para detener a Puigdemont.

Llarena y "la estrategia del miedo"

Para Cuevillas, las detenciones son parte del intento del Estado de asustar al entorno de Puigdemont, una "estrategia del miedo" dirigida a las filas independentistas. Aparte de señalar al Gobierno, el abogado del president también subraya la obcecación del juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena para volver a los políticos exiliados en territorio español.

Las peticiones de extradición del magistrado en Alemania, Reino Unido, Escocia y Suiza podrían no tener éxito e incluso alguna podría ser denegada, según Cuevillas, que ha utilizado una metáfora para evidenciar las complicaciones con que podría chocar Llarena: "Cuando haces cuatro paellas al mismo tiempo, es posible que se queme alguna, y parece que de momento la de Suiza ya se ha quemado", en referencia al hecho de que Suiza ya haya descartado tramitar la extradición por haber detectado motivos políticos.