El Col·lectiu Primer d’Octubre, corriente crítica dentro de ERC, ha puesto en marcha una campaña para que la militancia decida si hace falta mantener o no el apoyo parlamentario al president de la Generalitat, Salvador Illa. La entidad argumenta que, más de un año después del acuerdo de investidura, los socialistas han incumplido compromisos esenciales, especialmente en materia de soberanía fiscal y resolución del conflicto político catalán.
En el comunicado difundido este martes, titulado No a Illa, recuerdan que en el 2024 ya defendieron el voto negativo a la investidura, posición que entonces solo sumó una minoría dentro del partido. Ahora, dicen, las circunstancias han cambiado y creen que una amplia mayoría de militantes apostaría por la ruptura. El Colectivo acusa al PSC de no haber avanzado en los dos compromisos clave que formaban parte del acuerdo cerrado con ERC en el 2024, la soberanía fiscal y la resolución del conflicto político catalán. Afirman que "vistos los incumplimientos", muchos militantes, ahora, "votarían masivamente por el no". Ante esta situación, defienden que las bases republicanas tienen que volver a pronunciarse, con una pregunta concreta para someter a votación: ¿Estás de acuerdo que ERC retire el apoyo parlamente al gobierno de Salvador Illa por el incumplimiento del pacto de investidura? Para recoger apoyos, el Colectivo ha abierto un formulario en línea dirigido a toda la militancia.
El Colectivo 1.º de Octubre pedimos un referéndum a @Esquerra_ERC para retirar el apoyo|soporte a @salvadorilla pic.twitter.com/Ojpn4zih2x
— Colectivo 1 Octubre - #RecuperemERC (@1doctubre2) Augusto 12, 2025
"Catalunya tiene que seguir su camino"
Los impulsores acusan al PSC y al PSOE de priorizar la unidad de España antes que los acuerdos adquiridos con ERC. "Prefieren afrontar un escenario de una España gobernada por la ultraderecha antes que cumplir los compromisos con Catalunya. Pero Catalunya tiene que seguir su camino". También anuncian que, cuando la reforma interna prevista para septiembre lo permita, se constituirán como corriente formal dentro del partido y pedirán el apoyo de la base. Para recoger apoyos, han habilitado un formulario abierto a los afiliados con el objetivo de conseguir los avales necesarios para presentar formalmente la propuesta. La dirección del partido, encabezada por Oriol Junqueras, no es partidaria en estos momentos de romper el pacto y apuesta por dar más tiempo al Ejecutivo para que cumpla los compromisos pendientes, como el nuevo modelo de financiación o el traspaso de Rodalies.
El momento interno del partido es clave: este septiembre, el consejo nacional de ERC tiene previsto aprobar una reforma de los estatutos que permitirá reconocer oficialmente corrientes internas y establecer mecanismos para activar consultas, según adelantó El Periódico. Si se aprueba, cualquier iniciativa de este tipo tendrá que contar con el apoyo de un 10% de la militancia —unas 800 firmas— para poder salir adelante. El Col·lectiu, que hace seis años que actúa como corriente de hecho, ya ha anunciado que solicitará el reconocimiento formal tan pronto como la nueva normativa lo permita. Se reivindican como parte de una ERC "nítidamente independentista" y consideran que retirar el apoyo a Illa es un paso necesario para mantener este rumbo.