Gestionar la inyección mayor de recursos que ha aprobado nunca la Unión Europea sin intermediarios. Catalunya capitanea una alianza de territorios europeos que cierran filas para reclamar a las más altas instituciones del continente voz propia a la hora de decidir cómo se invierte el dinero proveniente de los fondos europeos de recuperación de la crisis del coronavirus. El primer paso, una carta dirigida a los presidentes de la Comisión, el Consejo y el Parlamento europeos, Ursula von der Leyen, Charles Michel y David Sassoli.

En la misiva, a la que han puesto voz en una comparecencia este jueves el vicepresident Aragonès, el conseller de Exteriores y la delegada del Govern en Bruselas, reivindican que a lo largo de estos nueve meses de pandemia han estado y todavía están "en primera línea, adoptando continuamente acciones para asegurar una recuperación sostenible." Y emplazan a los mandatarios europeos a entender que "Europa sólo podrá salir más fuerte de la crisis si sus territorios tienen los medios necesarios para implementar políticas dinámicas" dentro del ámbito de sus competencias, que incluyen políticas públicas sociales y sanitarias, de educación y formación profesional, de investigación y desarrollo, de política industrial, de desarrollo empresarial, de transporte y movilidad o de infraestructuras.

Entre los territorios que integran esta coalición están Euskadi, Baleares y la Comunidad Valenciana y una veintena más de otros lugares de Europa, como Baviera, el Tirol, Flandes, Occitania o la Emília Romaña. Según ha explicado el conseller de Exteriores, Bernat Solé, el objetivo no es crear una nueva comisión u órgano europeo, sino que les dejen participar activamente en la toma de decisiones relacionadas con la era post-Covid que se discuten en las más altas instancias. Argumentan que "la crisis de la Covid-19 no entiende de fronteras nacionales, pero los diferentes territorios afrontan retos diferentes".

pere aragones meritxell serret barrote soler apolilláis carbonell

750.000 millones pendientes de Hungría y Polonia

El paquete de estímulo acordado por la Unión Europea es histórico. Nunca antes se había movilizado una partida tan voluminosa. En total, 750.000 millones de euros. Los máximos beneficiarios de estos recursos serán España e Italia, los más castigados por la crisis del coronavirus.

En el caso del Estado español, la previsión es que reciba 140.000 millones, a distribuir entre todas las comunidades autónomas. Los presupuestos generales del Estado que se aprobarán en las próximas semanas incorporan 24.600 millones a repartir a lo largo de 2021. De hecho, el acuerdo presupuestario que ERC ha firmado con la Moncloa prevé que la Generalitat pueda cogestionar este fondo.

El calendario inicial con que trabajaba Europa era que entre enero y junio empezaran ya a llegar las ayudas a los respectivos estados miembros. Pero se han encontrado con un obstáculo en el camino. Polonia y Hungría han vetado la aprobación definitiva del fondo. "Esperamos que se apruebe a finales de año", ha manifestado la delegada del Govern en Bruselas, Meritxell Serret.