La consellera de Cultura, Natàlia Garriga, ha invitado "a todo el mundo" a sumarse al Pacte Nacional per la Lengua, del cual este miércoles se han presentado los objetivos y el calendario. Las únicas premisas, ha dicho, son "reconocer" la unidad de la lengua y la situación "compleja y delicada" que atraviesa, y compartir la necesidad de actuar. En este sentido, Garriga ha anunciado que el jefe de la oposición, Salvador Illa, le ha confirmado que el PSC formará parte, junto con los partidos de la coalición de Gobierno, la CUP y los comuns. 

Según la consellera, hay varios indicadores que muestran que el modelo lingüístico presenta "síntomas de agotamiento" y se ha emplazado "actualizar y modernizar" las herramientas que lo han hecho avanzar hasta ahora. La primera reunión del Pacte Nacional per la Llengua se reunirá por primera vez el próximo mes de febrero, con el Informe Académico sobre la situación del catalán elaborado por expertos sobre la mesa.

La reunión con formaciones políticas y entidades será el primer paso de un proceso participativo abierto a toda la ciudadanía que culminará en julio, con una síntesis de las aportaciones recogidas. La previsión es que en otoño se alcance un acuerdo marco, y que este se presente y firme en diciembre. Todo, servirá de base para el futuro plano de política lingüística plurianual.

Consenso político y social

Garriga, acompañada por el secretario de Política Lingüística, Francesc Xavier Vila, ha expuesto que el principal objetivo del plan es llegar a un consenso social y político sobre la situación del catalán y "consensuar las políticas necesarias". Vila ha añadido que no se trata tanto de marcarse objetivos porcentuales como de establecer "criterios y herramientas" de intervención por el futuro de la lengua.

Según Garriga, nos encontramos inmersos en un momento "crucial" por el futuro catalán, una lengua que, cree la consellera, está "lejos de los mínimos de conocimiento" y uso social deseable. También ha apuntado que los acuerdos en materia lingüística de "hace 40 años se tienen que actualizar y modernizar": "la sociedad ha cambiado, es diversa y multilingüe; necesitamos nuevas herramientas y analizar con realismo la situación del catalán".

Debate constructivo

En esta línea, la consellera ha apostado por "renovar los consensos que convirtieron el catalán en punto de encuentro y herramienta de cohesión", para garantizar la supervivencia. El futuro de la lengua, ha dicho Garriga, pide un debate "constructivo para que la estrategia sea compartida el máximo posible".

Ha sido en este punto cuando la consellera ha dicho que cuenta con la participación de "todo el mundo", y se ha referido al encargo de "más del 80%" del Parlament para sacar adelante el Pacte. "Tenemos la mano tendida y la voluntad de incluir a todo el mundo", ha dicho sobre los partidos que no han manifestado la voluntad de estar. Esto no incluye al PSC, que ya avanzó su participación y que su líder Salvador Illa ha confirmado personalmente a la consellera. Garriga ha recordado, eso sí, que para tomar parte del pacto hay que reconocer la unidad de la lengua, así como la situación "delicada" de la misma y la necesidad de actuar para revertirla.

Ámbitos prioritarios


Por su parte, el secretario de Política Lingüística ha adelantado que los ámbitos prioritarios de trabajo del Pacte estarán, en este orden: las administraciones públicas, el mundo educativo y la investigación, la cohesión social, la cultura, el audiovisual y los medios de comunicación, el mundo digital y las tecnologías de la lengua, el mundo socioeconómico y mundo laboral, salud y servicios asistenciales, el ocio y el deporte, la relación entre los territorios de habla catalana, ámbito estatal e internacional, y calidad de la lengua. El presupuesto inicial previsto por las actividades relacionadas con el Pacto es de 345.000 euros. 

En la imagen principal, la consellera de Cultura, Natàlia Garriga, y lo secretaría de política lingüística, Francesc Xavier Vila