Justo el mismo día que el president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha viajado hasta Madrid para encontrarse con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el Tribunal de Cuentas ha dado a conocer la fianza que ha impuesto a 40 exaltos cargos de la Generalitat acusados de malversación contable por destinar el presupuesto para la promoción exterior al procés independentista: 5,4 millones de euros.

Y el mismo president lo ha denunciado a través de un tuit mientras se encontraba en el AVE con destino Madrid. "El ensañamiento del Tribunal de Cuentas es una aberración. Una más. Desde el Govern mostramos todo el apoyo a los compañeros y compañeras afectados. Trabajamos para acompañaros en el proceso que hoy se abre. Nada nos parará", ha escrito en un primer tuit.

aragones TUIT

Precisamente, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha prometido hoy mismo que el Ejecutivo estará "al lado de los afectados" por esta causa, la cual ha tildado de nueva "oleada represiva" contra el movimiento independentista. Ahora bien, la portavoz no ha aclarado si será el Govern quien pague la fianza si los afectados finalmente no la pueden asumir.

En un segundo tuit, Aragonès se ha mostrado determinado de cara al encuentro que mantendrá esta tarde con el presidente español. "Hacia a Madrid. Es tiempo de acción y no de renuncias. Catalunya reclama la amnistía y la autodeterminación. Y el fin inmediato de la represión. Reactivar el diálogo sincero y la negociación con el estado es la prioridad, sabiendo de dónde venimos, dónde estamos y dónde queremos ir. Nosotros lo tenemos claro", ha reivindicado.

Denuncias de Mas, Puigdemont y Junqueras

También ha sido contundente la reacción de otros dirigentes independentistas, como los mismos expresidents Artur Mas y Carles Puigdemont, que se encuentran imputados. De hecho, la defensa de este último estudia la denuncia de este procedimiento ante la justicia belga. "Esto es una persecución en toda regla. Se pretende nuestra muerte civil, nuestra ruina. Pero ya nos estamos defendiendo como políticos", ha reprobado por su parte Mas.

También el líder de ERC, Oriol Junqueras, denunció ayer la situación lamentando que "el Tribunal de Cuentas embargará la casa de nuestros hijos" y que "ninguna democracia del mundo se tendría que permitir el lujo de represaliar a los hijos de nadie". "La represión no sólo es una cifra económica a pagar injustamente, sino el sufrimiento que esta genera", ha apuntado. El líder de ERC añadió que no pararán de trabajar hasta que "todos los represaliados sean libres".

 

Imagen principal: el president de la Generalitat, Pere Aragonès / Foto: Sergi Alcàzar