En medio de la polémica protagonizada por el alcalde de Madrid, el popular José Luis Martínez Almeida, ha intentado justificar cómo ha podido haber inaugurado en la capital española una estatua de tres metros de la Legión con una exaltación del militar José Millán-Astray, que fue fundador de este ejército y amigo personal del dictador Francisco Franco. En un discurso victimista, ha considerado acertado compara la figura de este militar franquista con la del presidente Lluís Companys. Para intentar justificar su presencia en la inauguración de la estatua en récord de la Legión, Almeida se ha declarado "víctima de un episodio de la cultura de la cancelación de la izquierda", una de las excusas más comunes entre la ultraderecha, censurado que a él se le critique para mencionar a Millán-Astray, pero que, en cambio, se pueda reivindicar a Lluís Companys," condenado por dar un golpe de estado el año 1934", en referencia a los hechos del seis de octubre cuando Companys proclamó el Estado catalán dentro de la República Federal Española. "Cada año se le hace un homenaje", ha subrayado, recordando la ofrenda de las autoridades catalanas en Montjuïc, donde fue ejecutado.

Desde el Gobierno, ya se ha anunciado que se investigará si el homenaje al franquista por parte del alcalde de la capital de España choca con la nueva ley de memoria democrática. Según José Luis Martínez Almeida esto es totalmente "ridículo", ya que la justicia avaló que se mantuviera el nombre de la calle Millán-Astray en la ciudad, que la izquierda había intentado cambiar por el de una maestra republicana. "No se puede ni mencionar el nombre de una calle, pero sí emitir sellos con el Partido Comunista, negociar con Otegi o que se pueda reivindicar a Compañeros o Largo Caballero", volviendo a comparar al procurador franquista con el presidente de la Generalitat que murió ejecutado o uno de los líderes históricos del PSOE y presidente del Gobierno durante la guerra civil.

Orgulloso tributo de Madrid a la Legión

Las declaraciones de Almeida que han desencadenado toda esta polémica se produjeron el martes durante el acto de inauguración de la estatua en honor a la Legión, donde el alcalde madrileño reivindicó la recuperación de una calle dedicada a José Millán-Astray. "En Madrid no hay acuartelamientos de la Legión, pero se le rinde tributo por toda la ciudad", celebró el alcalde, entre aplausos de los asistentes.

Estas declaraciones se enmarcan dentro de las negociaciones de los presupuestos municipales por el próximo año y también a las puertas de un año electoral por el cual Almeida parte como favorito a la espera de conocer al candidato estrella del PSOE. En este sentido, el portavoz del Grupo Mixto en el Ayuntamiento de Madrid, José Manuel Calvo, uno de los tres tránsfugas de Más Madrid, ya lo ha advertido que se tiene que retractar de sus alabanzas al general franquistas, disculparse y retirar su nombre del nomenclátor de la ciudad, si quiere negociar con ellos las cuentas municipales.