José Luis Ábalos guarda silencio delante del juez del Tribunal Supremo que lo investiga desde hace diez meses (en una causa iniciada en febrero de 2024) por los presuntos delitos de pertenencia a organización criminal, malversación, tráfico de influencias y cohecho. Leopoldo Puente lo citó después de conocerse el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sobre sus vínculos económicos, que detectó 95.000 euros en ingresos en efectivo sin justificación bancaria, entre los que había 20.000 euros de gastos “personales” con cargo a una “fuente de ingresos no declarada”. Ábalos ha llegado al Supremo a las nueve y cuarto de la mañana en taxi, solo y después de haber pasado por el Congreso de los Diputados, donde ha dejado aparcado su coche. Veinte minutos más tarde, ha llegado su abogado, José Aníbal Álvarez: él renunció a su defensa y pidió uno de oficio para hoy, pero el juez rechazó la renuncia. Es la cuarta vez que el exdirigente socialista se sienta delante del juez instructor, pero ahora ha sido la primera vez que se ha acogido a su derecho a no declarar, según indican fuentes jurídicas a ElNacional.cat. A pesar de esto, la Fiscalía Anticorrupción (a diferencia de lo que pidió con Santos Cerdán) ha evitado solicitar que se decrete prisión preventiva para él. Sí que lo han reclamado las acusaciones populares, lideradas por el PP, igual que hicieron en junio. El magistrado retiró el pasaporte a Ábalos a mediados de febrero y mantuvo la medida cautelar antes de verano.

📝 El juez del Supremo vuelve a citar a Ábalos y Koldo tras el nuevo informe de la UCO

 

Subsidiariamente a la prisión preventiva incondicional, las acusaciones populares han pedido prisión preventiva con una fianza de 650.000 euros. Lo han suscrito todas ellas excepto Adade, una fundación próxima al PSOE. Incluso Catalunya en Comú ha manifestado que no se oponía. Las acusaciones populares han alegado que hay riesgo de fuga y de destrucción de pruebas y se han escudado en el auto que justificó la prisión de Santos Cerdán porque consideran que “no tiene sentido” que él esté en prisión y Ábalos continúe en libertad. Además, han solicitado que, si se decretaba la prisión preventiva, se eligiera una cárcel distinta a Soto del Real para evitar que ambos coincidieran. Por su parte, el fiscal Anticorrupción, Alejandro Luzón, ha reconocido que hay cierto riesgo de fuga de Ábalos, pero ha argumentado que, como es diputado y tiene arraigo en España, el ingreso en prisión sería excesivo

Según relatan fuentes presentes en la declaración a ElNacional.cat, justo al inicio ha habido un rifirrafe entre Ábalos y el juez que se ha alargado unos cinco minutos. El magistrado quería saber si él declararía y Ábalos, para justificarse, quería exponer que no tenía asistencia letrada. Leopoldo Puente ha tenido que decirle tres o cuatro veces que no lo interrumpiera. “No hemos venido a intercambiar opiniones porque esto no es el Congreso”, le ha llegado a espetar. Ábalos ha alegado que “fraude habría sido renunciar al acta de diputado” y ha subrayado que no lo ha hecho. En otro momento, su abogado, José Aníbal Álvarez, ha sostenido que las acusaciones populares actuaban por fines políticos, pero el abogado del PP le ha contestado que no son acusaciones políticas, sino populares y que él no se prestaría a hacer un “paripé político”.

“Ingresos irregulares y opacos de diversa procedencia”

En el último auto, Leopoldo Puente sostenía que el informe de la UCO “profundiza en los indicios de criminalidad” y apuntaba que Koldo García y José Luis Ábalos podrían haber mantenido “métodos no transparentes de comunicación de sus respectivos patrimonios, recibiendo indistintamente ingresos irregulares y opacos de diversa procedencia, eventualmente fruto de la comisión de graves ilícitos penales”. “[Ábalos] podría haberse beneficiado de alguna fuente irregular de ingresos, lo que concordaría con las recepciones ilícitas de dinero en metálico que indiciariamente se le atribuyen”, relataba. Y esgrimía que las conclusiones del informe de la UCO contradicen las explicaciones de Ábalos: “Estos indicios no parecen concordar con las manifestaciones del señor Ábalos […] respecto a que su relación con el señor García no pasaba de lo ordinario entre un ministro con uno de sus diversos asesores”.

Hace diez días, el mismo Ábalos atribuyó las acusaciones contra él a una “fantasía” que “corresponde a una campaña para intentar crear una Gürtel dentro del PSOE” y justificó que los gastos que le atribuyó la UCO los pasaban “todas las personas del partido que tuvieran derecho a ser reembolsadas”. “No entiendo esta pasión carcelaria, la libertad es un bien supremo”, añadió en una entrevista en Mañaneros 360 de TVE.

Ábalos renuncia a su abogado, pide uno de oficio y el Supremo se lo niega

La declaración de hoy llega después de que José Luis Ábalos haya roto con su abogado, José Aníbal Álvarez. El lunes comunicó al Supremo que renunciaba a él en una maniobra que se interpretó como un intento de esquivar la prisión. El exdirigente socialista alegó que ha habido “diferencias irreconducibles” con su letrado que “se han convertido en una constante” y que hacen “inviable” que pueda continuar con él. “Se ha producido un deterioro irreversible de lo que debería ser una relación basada en la confianza”, esgrimió. Al día siguiente, solicitó un abogado de oficio al Supremo para que le pudiera asistir en la declaración de hoy aduciendo su voluntad de “cumplir con la comparecencia”.

José Aníbal Álvarez advocat Ábalos arribant al Suprem   EFE
El abogado José Aníbal Álvarez llegando al Tribunal Supremo hoy / Foto: EFE

Sin embargo, posteriormente, el juez rechazó la “intempestiva” renuncia de Ábalos argumentando que había cometido un “fraude de ley” y esgrimiendo que había una “completa ausencia de justificación razonable” de su decisión más allá de la voluntad de “provocar de manera indebida la suspensión de vistas o comparecencias oportunamente señaladas”. “Aceptar con naturalidad que toda petición de cambio de letrado forma parte del contenido material del derecho de defensa supondría distanciarnos del verdadero significado constitucional de este derecho para permitir que el mismo se instrumentalice con finalidades espurias”, argumentaba. Y reprochaba a Ábalos que, en una causa con preso, dado que Santos Cerdán está en Soto del Real desde el 30 de junio, haya tenido una “conducta dilatoria” con el “propósito encaminado llana y simplemente a entorpecer o perturbar el normal desarrollo del procedimiento”.

La cuarta declaración de Ábalos en el Supremo

La de hoy ha sido la cuarta vez que José Luis Ábalos ha sido citado por el juez Leopoldo Puente a lo largo de la instrucción. La primera fue en diciembre de 2024, que fue la declaración voluntaria que hizo antes de que el Congreso aprobara su suplicatorio: negó las acusaciones contra él y aseguró que “no hubo comisiones”. “Agradezco al juez que me haya permitido esta declaración voluntaria, hace muchos meses que intento declarar ante la autoridad judicial, […] he dado las aclaraciones suficientes”, sostuvo a la salida ante los periodistas.

📝 Ábalos niega al juez del Supremo las acusaciones contra él por el caso Koldo: “No hubo comisiones”

📝 El Supremo retira el pasaporte a Ábalos y le hace comparecer cada 15 días por el caso Koldo

📝 El Supremo rechaza enviar a Ábalos y a Koldo a prisión tras declarar por el caso Cerdán

 

Posteriormente, con la inmunidad parlamentaria levantada, volvió dos veces ante el juez. En febrero, reiteró que su patrimonio está “limpio” y el juez decidió quitarle el pasaporte. Y en junio, después del estallido del caso Santos Cerdán, afirmó que no se reconocía en las grabaciones de Koldo García, negó cualquier implicación en los presuntos amaños en adjudicaciones de obras públicas y, en consecuencia, que cobrara comisiones. Ante la insistencia del instructor, reiteró que no recuerda conversaciones de ese tipo y que, en todo caso, sería “absurdo” porque él “no tenía capacidad de influencia” en las licitaciones. Las acusaciones populares (encabezadas por el PP) pidieron prisión preventiva para él, pero la Fiscalía fue partidaria de mantener las mismas medidas cautelares que tenía y el juez suscribió esta última petición.