Anoche decíamos adiós al FAQS, al Preguntes freqüents, de TV3. Uno de los programas más vistos en Catalunya durante las noches de los sábados de los últimos años. He tenido el honor de participar desde su inicio hasta el último día. Y digo que ha sido un honor para mí, porque, habiendo colaborado en las distintas cadenas de la televisión española, he podido conocer de primera mano la tele de la que tantos hablan (y que fuera de Catalunya no se ve): TV3. 

De mi experiencia, habiendo trabajado con Ricard Ustrell como presentador, con Laura Rosel y con Cris Puig, me llevo los mejores recuerdos y la gratitud por haber aprendido muchísimo de compañeras y compañeros de la más alta profesionalidad. Guardo el cariño sincero por las compañeras de maquillaje y peluquería, por todos los técnicos, por las compañeras de producción, por todos y cada uno de los que han formado una familia durante estos años. Porque con todos he compartido momentos de mucha emoción, viviendo la intensidad de estos años siempre con un pie hacia el plató y el otro hacia lo que sucedía en la calle. 

El FAQS ha sido un programa donde se han abordado temas de máximo interés desde la pluralidad y el respeto absoluto a los distintos y dispares puntos de vista. Muy enfrentados durante muchos meses. El formato del programa demostró que se podían presentar argumentos de manera tranquila, respetuosa y con posibilidad de debatir desde la calma. Una rara cosa en las televisiones actuales. 

Durante estos años hemos visto entrevistas a distintas personalidades del ámbito catalán, estatal e internacional de máximo interés. Se han revelado en ella cuestiones fundamentales que han sido clave para entender muchas de las desgracias que hoy padece esta aprendiz de democracia que es España. 

Los que hemos trabajado en el FAQS hemos sido insultados, menospreciados y acusados de muchas barbaridades por el hecho de participar en un programa abierto, plural, que ponía información absolutamente escondida en las cloacas del Estado. En mi caso, cuando se me silenció deliberadamente de televisiones estatales por haber querido hablar del asunto catalán con una perspectiva que hiciera por entender, por escuchar y por dialogar con el independentismo, pude expresar mis opiniones en este programa. 

El FAQS ha sido mucho más que un mero programa de televisión; ha sido una manera de defender derechos y libertades fundamentales en un tiempo en el que estaban siendo trituradas

En Preguntes freqüents he vivido en primera persona la batalla de un equipo que se ha dejado la piel por luchar contra viento y marea para mantener a los espectadores informados, por contar lo que no se "debía contar". 

He recibido, gracias a mi presencia en este espacio, el cariño de muchísima gente. Y por ello no puedo estar más agradecida. 

He visto también cómo se ha atacado sin tregua a compañeras de trabajo a quienes estimo, tanto en lo profesional como en lo personal. Ataques absolutamente crueles de quienes, en algunos casos, parecían descargar su frustración y rabia por desencantos políticos contra personas que han tenido "la culpa" de tener que dar la cara cada día en una plaza en la que es muy complicado torear. 

He visto las presiones a algunos compañeros por querer poner luz sobre determinados asuntos. Presiones de todo tipo y desde todas partes. De "dentro", de "fuera", de "aquí" y de "allí". Y les he visto defender el trabajo de todo un equipo, les he visto llorar por otras compañeras. 

Gracias al FAQS he podido abrazar a personas a las que admiro. He podido coincidir en los pasillos con referentes en la defensa de las libertades. Siempre ha habido una silla en el Preguntes freqüents para quienes se la han jugado con dignidad. En la política, en la cultura, y en cualquier causa justa. Este programa de la "televisión catalana" ha dado más voz a las luchas sociales que cualquier otro de cualquier rincón del Estado. 

He conocido entre sus bambalinas a cantantes, a actrices, a escritores, fotógrafos, periodistas, músicos brillantes. He descubierto a joyas que raramente tienen una oportunidad de presentar su trabajo en directo en ninguna otra televisión. 

Ayer se cargaron el FAQS por un poco de todo esto. Porque era posiblemente uno de los poquísimos, por no decir de los únicos programas de la tele, donde se trabajaba por garantizar el acceso a una información plural, respetuosa, de interés y relevante. 

Soy consciente de muchas de las cosas que han sucedido en estos años. Entiendo y comprendo las exigencias, reproches y anhelos de los televidentes que han notado algunas de las consecuencias de la enorme presión que se ha ejercido sobre este programa. Y en muchos casos tienen razón. Pero más todavía sé de la enorme suerte que ha sido formar parte de este equipo. Poder decir "yo trabajaba en el FAQS", que ha sido mucho más que un mero programa de tele. Ha sido una manera de defender derechos y libertades fundamentales en un tiempo en el que estaban siendo triturados. 

Por la parte que me toca, he intentado cumplir con ese, que era mi objetivo. Sé que todos hemos intentado hacerlo lo mejor que hemos sabido. Y cerramos esta puerta con enorme gratitud, y con la esperanza de que el Preguntes freqüents haya podido crear escuela. 

Gracias, FAQS