ÚLTIMA HORA: Sigue el minuto a minuto del conflicto Rusia - Ucrania
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, no se arruga ante la amenaza rusa y ha asegurado que sólo aceptará un ultimátum ruso "cuándo todos hayamos muerto". Estas declaraciones son una respuesta directa del chantaje de Moscú que pedía a los ucranianos que abandonaran la ciudad de Mariúpol. "Ucrania no puede cumplir nunca un ultimátum de la Federación Rusa. Tenemos que estar muy muertos y sólo entonces se cumplirá el ultimátum para entregar Járkov, Mariupol o Kyiv. No podemos hacerlo", ha afirmado en una entrevista. El domingo por la noche Rusia dio un ultimátum a Ucrania: el ejército ucraniano tendría que entregar las armas y abandonar la ciudad antes del mediodía de este lunes. Esta propuesta de rendición que hizo el Kremlin no ha estado bien recibida por el Ejecutivo de Zelenski. Durante las primeras horas de este, el gobierno ucraniano ya anunció que rechazaba radicalmente la propuesta de Putin, la cual han considerado un delirio. Ahora es el presidente Zelenski quien descarta rotundamente entregar ninguna ciudad.

Zelenski ha asegurado que incluso las ciudades ya ocupadas por los rusos, como Melitopol o Berdyansk, "cuando las tropas rusas entran, la gente no se rinde. Si ponen su bandera, la gente la baja. Mataron a un hombre, sí, la gente se escondió, pero por la noche la gente salió y volvió a sacar la bandera. ¿Qué queréis? ¿Destruirnos a todos? Podemos cumplir el ultimátum sólo cuando ya no estemos", ha enfatizado el jefe del ejecutivo ucraniano.

El asedio en Mariupol

El asedio sobre Mariúpol ha llevado la ciudad y sus habitantes al límite. Sin suministros, gas, electricidad, calefacción ni corredores humanitarios estables; así viven los civiles de esta ciudad portuaria. Se trata del punto más caliente de la guerra en Ucrania, hoy por hoy, y su presidente se refiere a menudo. Unas horas antes del ultimátum ruso, Zelenski ha afirmado que el terror de este asedio pasará a la historia. "Hacer eso en una ciudad pacífica... es un terror que se recordará durante siglos", ha sentenciado. Las palabras del presidente ucraniano llegaban después de que unas horas antes un nuevo bombardeo ruso sobre la localidad impactara contra una escuela de arte que servía de refugio a 400 personas. "De momento, no sabemos cuántos están vivos. Lo que sí que sabemos es que abatiremos el piloto que ha tirado esta bomba, como ya hemos hecho con otro centenar de criminales de guerra," declaró Zelenski el mismo domingo.

La Inteligencia británica, justamente señala que la superioridad rusa en esta guerra no viene de los ataques al suelo o desde el mar, sino desde el aire. Los bombardeos están siendo la mejor arma de Rusia para someter nuevas localidades, ya que en el avance por el suelo, la resistencia de Ucrania les frena el paso. Zelenski ha destacado la capacidad del pueblo ucraniano para combatir contra una de las potencias militares más destacadas del mundo. "Los ucranianos han demostrado que pueden combatir más profesionalmente que un ejército que hace décadas que lucha en varias regiones y condiciones", ha afirmado el presidente.

A pesar de esta resistencia de las fuerzas armadas ucranianas, tampoco tienen la capacidad para iniciar un gran contraataque contra los militares rusos, según Defensa británica. Es decir, los dos países se encuentran en un impás ante un conflicto por encima de sus posibilidades, delante de lo que el Reino Unido augura que Rusia explotará su superioridad por el aire y los bombardeos se intensificarán.