Ya hace más de dos meses que Rusia empezó la guerra en Ucrania. Putin considera que se trata de un territorio clave en su área de influencia y no quiere que flirtee con Occidente, pero más allá de los motivos políticos, también hay otros geoestratégicos. Ucrania esconde un gran tesoro que Rusia anhela: las reservas de litio mayores del mundo.

 

El litio es sin duda el mineral del futuro. Se utiliza principalmente para fabricar baterías de coches eléctricos o de móviles, entre otros, unas industrias en auge, y se trata de un material muy buscado porque es una energía limpia. El control del litio supone controlar el mercado de energías renovables, una posición que ahora mismo quieren tener todas las potencias. Además, las sales de litio también se utilizan en la industria farmacéutica para hacer medicamentos que regulan los estados anímicos, unos fármacos que, desgraciadamente, cada vez se consumen más. Por todo ello, su precio ha subido más de un 250% este 2022.

Por todo eso, no es coincidencia que Rusia iniciara la invasión en Ucrania días después de que un estudio científico confirmara que el país esconde grandes reservas, seguramente las mayores del planeta. La Academia Nacional de las Ciencias de Ucrania calcula que en el subsuelo del país hay casi medio millón de toneladas de óxido de litio, un auténtico tesoro. Además, Ucrania tiene uno de los depósitos mayores en la provincia de Donetsk, en el Donbass, precisamente uno de los puntos más calientes de la guerra con Rusia y donde Putin está centrando esfuerzos.

¿Qué hace Europa?

Europa, por su parte, también es la primera interesada en disponer de estos recursos, ya que ahora mismo la producción de litio en el continente es muy escasa. Sólo extrae de Portugal y en cantidades bajas. España también tiene reservas, pero de momento no se ha permitido explotarlas por el gran impacto medioambiental que supondría porque, aunque el litio sirve para promocionar el uso de energías limpias, eso no quiere decir que no produzca daños en el suelo que se explota. En concreto, Cáceres dispone del segundo yacimiento de litio mayor de Europa. La mina de San José Valdeflórez, en Cáceres, tiene aproximadamente 1,6 millones de toneladas, pero siempre ha recibido el rechazo tanto de las administraciones como de las entidades y vecinos de la zona.