Rusia ha puesto precio a cada tanque de la OTAN destruido, una semana después de la decisión de los aliados occidentales de Ucrania. Países como Alemania y España anunciaron el envío de tanques Leopard, mientras que los Estados Unidos decidieron enviar tanques Abrams. El acuerdo de Occidente no gustó nada al Kremlin, que respondió con más de treinta misiles sobre territorio ucraniano. Ahora, la escalada continúa y la empresa rusa FORES ha ofrecido recompensas en metálico a los militares que destruyan los tanques que algunos países de la Alianza Atlántica suministrarán a Kyiv para luchar contra Moscú. La compañía en cuestión tiene la sede en los Urales y se dedica a la fabricación de apoyos para la industria energética.

"Los militares rusos que destruyan o capturen un tanque alemán Leopard 2 o un norteamericano Abrams recibirán una recompensa monetaria. La compañía FORES pagará cinco millones de rublos (casi 66.000 euros) por la primera unidad destruida", ha anunciado este lunes la empresa en un comunicado. Por cada tanque adicional, FORES ha prometido pagar medio millón de rublos (casi 6.600 euros). Quede claro que los tanques todavía no se han enviado y que podrían pasar unos cuantos meses antes de que se envíen la mayor parte de las entregas prometidas. Sea como sea, la cosa no se ha acabado aquí.

Después de los tanques, los cazas

Fue este fin de semana cuando Ucrania pidió cazas F-16, aunque los aliados occidentales no lo ven claro por miedo de agravar la escalada del conflicto. En caso de que los ucranianos empiecen a recibir aviones de combate occidentales y que los cazas tanto F-15 como F-16 sean declarados objetivos legítimos para los militares rusos, "la recompensa financiera por el primer aparato destruido será de quince millones de rublos (casi 198.000 euros)". Parece que FORES se avanza a cualquier escenario que se derive de la invasión rusa.

"La decisión de suministrar tanques a Kyiv demuestra que la OTAN no se limita a entregar en Ucrania solo armamento defensivo, lo que plantea la necesidad de dar apoyo a nuestro ejército", ha subrayado la empresa, utilizando el vocabulario de los funcionarios rusos y los presentadores de televisión estatales a favor de la invasión. Al respecto, este lunes hemos conocido la locura desatada en la televisión pública rusa por el envío de tanques Leopard en Ucrania. Entre otras cosas, un comentarista sugirió que en Alemania las máscaras ya han caído y que Occidente abraza abiertamente el nazismo. Además, otro tertuliano añadió que el envío de tanques no hace más que acercarnos al "momento en el cual se pulsará el botón rojo".