Imagen insólita que ha provocado estupefacción en China (y en las redes). Los habitantes de Liaoning, en el este de China, cerca de la frontera con Corea del Norte, han presenciado con sorpresa una lluvia inusual. Inusual porque no caía agua del cielo, sino gusanos. Las imágenes que se han compartido en las redes muestran coches aparcados completamente cubiertos de lo que podrían ser gusanos y gente por la calle protegiéndose con paraguas.

Aunque no se ha sabido qué ha provocado este fenómeno, la revista Mother Nature Network puntualiza que los gusanos podrían haber sido arrastrados por fuertes rachas de viento. Una teoría que comparte también la publicación New York Post. A pesar de todo, esta teoría no es la única. El diario británico Mirror, publica que podrían ser flores de álamo. Un hecho que otros usuarios de las redes también han validado. Sin embargo, sí que es cierto que se han registrado "lluvias" de insectos o peces porque se han visto atrapados en tornados.

Lluvia de animales

La lluvia de animales, para decirlo de alguna manera, es un fenómeno meteorológico donde animales que no quieren se caen del cielo. Aunque pueda parecer extraño, es algo que ha pasado o ha sido reportado en varios países a lo largo de la historia. Las hipótesis con más fundamento que validan este tipo de fenómenos son trombas marinas y tornados que recogen criaturas como por ejemplo peces o ranas y las transportan varios kilómetros hasta que caen como si fuera lluvia.

Según parece, el físico francés André-Marie Ampère, que vivió entre 1775 y 1836, fue el primero que se tomó de manera seria este tipo de fenómenos. De esta manera, dirigiéndose a la Sociedad de Ciencias Naturales, Ampère sugirió que, a veces, las ranas y el sapo, se pasean en 'rebaño' y los vientos violentos podrían recogerlos y transportarlos varios kilómetros. El fenómeno fue más allá. Después de que Singapur sufriera una lluvia de peces, el año 1861, el naturalista francés Francis de Laporte de Castelnau, especuló que estos podrían arrastrarse por el suelo, de un charco en otro, siguiendo la lluvia.

A pesar de todo, la explicación más creíble para muchos, sigue siendo la misma: animales arrastrados por vientos y tornados largas distancias. Una explicación que podría valer también para las precipitaciones de animales que pasan de manera ocasional en diferentes puntos de la tierra. De hecho, en las redes, algunos usuarios que se hacían eco de la lluvia de gusanos de China, recordaban también una lluvia de peces en Australia. Esta es la hipótesis científica con más peso actualmente, que las trombas marinas o tornados que se forman sobre el agua, arrastra diferentes especies, arrastrándolas largas distancias.

Los casos más reportados han sido lluvia de peces, las últimas las de Australia y Texas, en el 2021. Pero también ha llovido arañas del cielo, el último caso, precisamente también a Australia, en el 2015. Ranas y sapos, en Uruguay en el 2011 y medusas en Bath, Inglaterra, en 1894, gusanos en Luisiana en el 2007 y pulpos y estrellas del mar en China en el 2018.