Cuando un restaurante es conocido, suele ser por la oferta gastronómica que tiene o por el carisma de la persona que lo regenta. Ahora bien, otra opción para que un restaurante se convierta en el centro de todas las miradas es que lo visite un famoso. Y en el centro de Barcelona hay un establecimiento muy conocido justamente por eso; pero no solo porque lo haya visitado un famoso, sino porque por este local ha pasado casi toda la plantilla del primer equipo masculino de fútbol del Barça.
El restaurante que enamora a los jugadores del Barça
En la calle Aragó, entre el trasiego de personas, vehículos y ruidos, hay un pequeño espacio tranquilo regentado por un cocinero turco que se ha hecho famoso por cocinar bien, pero sobre todo por haber enamorado a los paladares de los jugadores del Barça. Se trata del restaurante Gaudim, regentado por el chef Semi, un cocinero que se ha introducido a la cultura y la cocina catalana gracias a su suegra. Su secreto no es otro que cocinar platos sencillos, pero muy bien hechos, en los cuales brilla el producto, que siempre es de primera calidad. No hace elaboraciones complicadas ni decoraciones que no aporten nada al plato: Semi tiene claro que la mejor manera de hacer las cosas es con austeridad, humildad y sentido común. Unos valores que ligan con la filosofía del buen saber hacer de los jugadores del Barça.

Abierto el año 2013, el restaurante se ha hecho un nombre entre los locales más famosos de la ciudad. El jugador que abrió la lata fue Ivan Rakitić, mítico centrocampista blaugrana y actual jugador del Hajduk Split, un equipo croata. Después de Rakitić han seguido más, hasta la mayoría de jugadores que forman actualmente la plantilla del Fútbol Club Barcelona, entrenador incluido.
Espíritu blaugrana
El restaurante destaca por ofrecer platos deliciosos en un espacio único. Decenas de camisetas llenan un comedor en el cual se respira el espíritu blaugrana. Uno de los clientes habituales del establecimiento es Lamine Yamal, jugador que disfruta con los platos de pescado y verdura asada. El éxito entre los jugadores del Barça es tal que el restaurante ya no sabe dónde meter todas las camisetas firmadas que tiene. Además, los jugadores también lo obsequian con otros detalles como botas o regalos diversos que Semi ya no sabe cómo lucir. Y si el restaurante ha triunfado entre los jugadores, además de la comida, es gracias al trato amable, humilde y cercano que tiene Semi y todo el equipo con los jugadores y con el resto de clientes. Del Barça solo falta que vayan Pedri y Raphinha para completar una alineación gastronómica de éxito casi inédita en Barcelona.