ÚLTIMA HORA | Sigue el minuto a minuto del conflicto Rusia - Ucrania
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha confirmado este lunes que el ejército ruso ha atacado 31 centros sanitarios en Ucrania. Eran hospitales, centros psiquiátricos o maternidades, como la de Mariúpol. Estos ataques han dejado hasta ahora 12 muertos y 34 heridos, algunos de los cuales eran trabajadores sanitarios. Atacar los centros sanitarios supone una violación del derecho internacional, ya que priva a la población recibir asistencia médica, es decir, una violación de los derechos humanos. Eso lo ha recordado la OMS en un comunicado: "La OMS condena enérgicamente los actos de violencia contra la asistencia sanitaria. Cada uno de los ataques priva a las personas de servicios que salvan vidas. Los ataques a la asistencia sanitaria son violaciones del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos".

Desde que empezó la invasión rusa en Ucrania, la OMS ha estado trabajando con el fin de garantizar la asistencia sanitaria en el país. En un principio, se enfocaba en garantizar que al país llegara un flujo constante de suministros sanitarios, de manera que los países vecinos dispusieran de la infraestructura para atender las necesidades de los refugiados, así como para dar apoyo al sistema sanitario de Ucrania para que pueda satisfacer las necesidades sanitarias inmediatas de los ciudadanos. Desde hace unos días, sin embargo, los esfuerzos de la organización también se han tenido que centrar en la denuncia de la violación del derecho internacional por los bombardeos en centros sanitarios.

La OMS ha recordado en repetidas ocasiones que el ataque a este tipo de infraestructuras sanitarias está prohibido, pero los mandos rusos no solo no han hecho caso, sino que han justificado sus acciones. Lo que tenía que ser una operación especial (no una guerra) que atacaría solo objetivos clavos (teóricamente ninguna infraestructura civil), según los rusos, está siendo una violenta invasión que golpea la población civil. A pesar de las imágenes de pacientes abandonando hospitales medio destruidos, el gobierno ruso sigue asegurando que los centros sanitarios que han atacado estaban ocupados por el ejército ucraniano que los utilizara como punto logístico, no como hospital. De esta manera se busca justificar estos ataques.

Suministro urgente

Desde el inicio de la guerra, la OMS ha trabajado para que se pudiera garantizar un mínimo de asistencia médica a los ciudadanos ucranianos. Desde el 24 de febrero se trabaja para hacer llegar todo tipo de equipamientos en territorio ucraniano. Generadores de oxígeno, generadores para mantener el suministro eléctrico en los centros sanitarios afectados, desfibriladores, monitores, medicamentos para anestesia, sales de rehidratación, gasas y vendas son algunos de los suministros médicos que la OMS y sus socios están enviando a Ucrania para salvar vidas y mantener los servicios sanitarios.

Todos los suministros se distribuyen "en estrecha coordinación" con el Ministerio de Salud ucraniano, según recoge Europa Press. La OMS ha avanzado que "los próximos días y semanas habrá un flujo constante de suministros médicos, como aparte de un esfuerzo por garantizar el acceso de la población a los medicamentos esenciales y la atención médica".