La Comisión Europea abordará este viernes en una reunión en Bruselas el llamado muro de drones que quiere construir para proteger el flanco oriental de la Unión Europea contra la amenaza rusa, y poder afrontar las cada vez más frecuentes incursiones en el espacio aéreo europeo presuntamente ordenadas desde el Kremlin por el régimen de Vladímir Putin. La presidenta Ursula von der Leyen anunció la propuesta de crear un muro de drones en su discurso sobre el Estado de la Unión, el pasado 10 de septiembre, y en su intervención, subrayó la necesidad de responder la llamada de los países bálticos para levantar este muro, que tiene que servir como base para una defensa creíble del flanco oriental de Europa ante esta amenaza rusa. En la reunión de hoy tomarán parte el comisario europeo de Defensa y Espacio, Andrius Kubilius, representantes de la OTAN y nueve Estados miembros situados a la primera línea frente a Rusia —Estonia, Letonia, Finlandia, Lituania, Polonia, Rumania, Bulgaria, Eslovaquia y Dinamarca—, así como Ucrania. La reunión tiene como objetivo avanzar en la propuesta de crear este muro antidrones, definiendo las capacidades, las necesidades militares y la financiación necesarias para reforzar la defensa del flanco oriental de Europa.

La infraestructura básica, operativa en un año

Se espera que la fase inicial de preparación del muro sea posible en aproximadamente un año, y que en este tiempo esté operativa la infraestructura básica. La Comisión Europea subraya que esta defensa es crucial para blindar la integridad del espacio aéreo europeo y disuadir agresiones rusas, especialmente en el contexto de la guerra a Ucrania y de la escalada de tensiones militares en la región. El portavoz comunitario, Thomas Regnier, explicó este jueves que "estas últimas incursiones con drones ponen de manifiesto una vez más el trabajo que se está haciendo actualmente para construir este muro contra drones". El portavoz admitió también que Hungría y Eslovaquia, dos países que mantienen unos fuertes vínculos económicos y políticos con Moscú, no han sido invitadas al encuentro de este viernes. La iniciativa se concibe como un proyecto multinacional en que los Estados miembros serán los principales responsables de aportar capacidades, mientras que la Comisión Europea explorará las fórmulas de apoyo financiero y técnico. Son los Estados miembros los que están al mando. De aquí esta primera reunión con los países de primera línea, para ver qué pueden poner ya sobre la mesa," señaló Regnier.

Financiado con préstamos SAFE

Ursula von der Leyen anunció el pasado 10 de septiembre que la CE destinaría 6.000 millones a una alianza de drones con Ucrania para darle apoyo en su guerra contra Rusia, y lanzó la propuesta de construir un muro de drones en el flanco oriental. La financiación de esta alianza con Ucrania saldrán del préstamo ERA, la herramienta acordada por el G7 que prevé el préstamo de fondo en el gobierno de Volodímir Zelenski, que les devolverá con los fondos rusos inmovilizados en territorio europeo. Pero aparte, la UE quiere construir este muro de drones para proteger el flanco oriental comunitario, que será sufragado principalmente a través del mecanismo de préstamos SAFE, con un volumen de hasta 150.000 millones de euros, diseñado para impulsar adquisiciones conjuntas en seguridad y defensa. Además, está previsto un apoyo financiero específico de 1.500 millones de euros del presupuesto comunitario entre 2025 y 2027 para este proyecto. Con Rusia como a principal amenaza, la presidenta de la Comisión destacó que "no hay ninguna duda: el flanco oriental de Europa protege toda Europa. Desde el mar Báltico hasta el mar Negro. Tenemos que invertir para reforzar el flanco oriental con una guardia. Eso significa dotar Europa de medios estratégicos independientes. Tenemos que invertir en la vigilancia espacial en tiempo real para que ningún movimiento de fuerzas pase desapercibido. Hace falta responder al llamamiento de nuestros amigos bálticos y construir este muro de drones".

Una red avanzada de vigilancia y defensa

Este muro de drones será una red avanzada de vigilancia y defensa formada por drones de reconocimiento, tecnología antiaérea específica contra drones, sensores, vigilancia satelital e inteligencia artificial. Este muro se ubicará principalmente en el flanco oriental de Europa, abarcando países próximos a Rusia como Estonia, Letonia, Finlandia, Lituania, Polonia, Rumania, Bulgaria y también Dinamarca, con la colaboración de Ucrania, que ha desarrollado experiencia tecnológica en drones a raíz de la guerra.

El objetivo fundamental es crear una barrera eficaz para la detección temprana de drones enemigos, que suelen volar muy bajo y son difíciles de rastrear con sistemas tradicionales, y garantizar la capacidad de responder rápidamente para neutralizarlos. La iniciativa nace a raíz de las recientes incursiones y violaciones del espacio aéreo europeo con drones rusos, que incluso han provocado cierres temporales de aeropuertos, como el de Copenhague. El muro incluirá tanto sistema de detección como de intervención activa ante posibles amenazas aéreas, apoyado por un importante programa comunitario de gasto en defensa y para la producción nacional de drones.