El candidato demócrata a la presidencia de los Estados Unidos, Joe Biden, ha dicho en un discurso durante la madrugada de este miércoles que cree estar en "buen camino" de ganar las elecciones y ha pedido "paciencia" a sus seguidores hasta que se cuenten todos los votos. "No sabremos los resultados hasta mañana por la mañana -es decir, por la tarde de nuestra casa- ni Trump, ni yo tenemos que declarar un ganador, es una decisión de los americanos y estamos contentos".

Desde Wilmington, en el estado de Delaware, Biden ha señalado que cree haber ganado el estado de Arizona y Minesota y se ha mostrado confiado en sus posibilidades en Michigan, Wisconsin y Georgia. El ex-vicepresidente ha dado las gracias a sus votantes y los ha pedido que "mantengan la fe".

El cinturón de óxido, clave

Una vez más, las encuestas han vuelto a subestimar al candidato republicano, Donald Trump, que ha conseguido imponerse a Florida gracias al voto latino, especialmente el del latín. La victoria de Trump en este estado y Ohio, dos de los considerados estados claves ha apretar la pugna.

Biden lidera ampliamente en Arizona y una victoria supondría arrancar a Trump uno de los estados rojos de 2016 que el magnate neoyorkino arrancó a Hillary Clinton.

No obstante, el resultado de las elecciones no se conocerá en la noche electoral, ya que las papeletas del voto avanzado y el voto por correo de estados como Wisconsin, Michigan, Pensilvania o Georgia no se acabarán contar hasta mañana como mínimo En estos estados, Trump está actualmente con ventaja en el recuento, pero faltan para entrar en el sistema las papeletas emitidas por anticipados que suelen ser enviadas mayoritariamente por demócratas.

Por eso, el resultado electoral es incierto y podría estar sujeto a posteriores disputas en tribunales impulsadas por los republicanos para tratar de invalidar partes del recuento.

Más votos que nunca

Antes de saber la cifra definitiva de votos emitidos, y con la previsión de una fuerte subida a la participación, más de 102 millones de ciudadanos ya habían depositado su voto al avance a las elecciones presidenciales de los Estados Unidos que se celebran este martes.

Eso representa un 75% del voto total de las elecciones del 2016, donde los Demócratas perdieron la Casa Blanca ni tampoco consiguieron el control de cabeza de las dos cámaras del Congreso: el Senado y la Cámara de Representantes.

Lógicamente, la pandemia y las preocupaciones sobre la seguridad sanitaria en los colegios electorales más concurridos, han llevado los partidos, estados y municipios a pedir el voto por correo anticipado a los ciudadanos, que lo han hecho de forma masiva.