Apenas unas horas después de alcanzar un alto el fuego entre la India y Pakistán con la mediación de Estados Unidos, se han denunciado violaciones del acuerdo desde las principales ciudades de la Cachemira india, el territorio que había soportado la mayor parte de cuatro días de combates. Así lo confirman las explosiones oídas por varios testigos en la región en disputa, que reactivan la espiral alarmante del conflicto después de un breve paro con la firma de Donald Trump. Se han notificado impactos de proyectiles en Srinagar y Jammu, con breves flashes sobre un cielo nocturno que recordaban a los de la noche anterior. De esta manera, se reanudan los ataques en el marco de guerra iniciada en 1947, a raíz de su independencia del Imperio Británico.

El secretario de Asuntos Exteriores de la India, Vikram Misri, ha ofrecido una breve sesión informativa en la que ha asegurado que "durante las últimas horas, ha habido repetidas violaciones del acuerdo". "Esto es un incumplimiento del acuerdo al que hemos llegado hoy mismo", reiteró. Misri ha dicho que las fuerzas armadas de la India están "dando una respuesta adecuada" y ha concluido su sesión informativa "pidiendo a Pakistán que aborde estas violaciones". Pero Pakistán aún no ha hecho comentarios sobre la declaración del secretario de Asuntos Exteriores indio.

Los bombardeos de esta semana han sido los más violentos de los últimos treinta años de conflicto y amenazaban con reactivar la guerra a gran escala en una de las regiones más volátiles y densamente pobladas del mundo. El armamento nuclear sobre el tablero agravaba estas preocupaciones, ya que el ejército pakistaní dijo que se reuniría con un órgano superior que supervisaba sus ojivas. Sin embargo, el ministro de Defensa del país dijo que no se había programado ninguna reunión de este tipo. Lo hizo horas después de una noche de combates intensos en que las dos potencias atacaron las bases militares del enemigo y el número combinado de civiles muertos llegó a los 66.

Todo ello había cesado este sábado gracias al alto el fuego alcanzado entre la India y Pakistán. De hecho, el ministro de Asuntos Exteriores pakistaní, Ishaq Dar, había publicado un mensaje en X asegurando que el acuerdo era "de efecto inmediato" y que su nación "siempre se ha esforzado por la paz y la seguridad en la región, sin comprometer su soberanía e integridad territorial". Por su parte, el secretario de Asuntos Exteriores indio había dicho que los jefes militares de los dos países habían hablado y habían acordado que todos los combates se detendrían a las 11:30 GMT. Este, sin embargo, sin utilizar el concepto "alto el fuego".

Alto el fuego "completo e inmediato"

El acuerdo había llegado, en parte, gracias a la mediación de la Casa Blanca, liderada por el presidente norteamericano Donald Trump. El magnate ha publicado un mensaje en Truth Social en que celebraba que, "después de una larga noche", la India y Pakistán habían acordado cesar sus ataques de manera "completa e inmediata". Hasta este punto, todo iba bien. Los jefes militares incluso habían programado una nueva ronda de conversaciones el 12 de mayo, pero los últimos bombardeos han vuelto a sumir la región de Cachemira en un clima de incertidumbre con la guerra nuclear como máximo miedo.