Para tomar un buen desayuno de tenedor a veces no hace falta romperse mucho la cabeza. Si bien es cierto que cada vez hay más locales nuevos, a menudo solo hay que detenerse y pensar en los restaurantes de toda la vida. Aquellos establecimientos que son un referente en el lugar donde vives y que si han estado sirviendo buena comida toda la vida es porque saben hacer las cosas bien. Es el caso del bar Tòfol, un clásico leridano donde se puede probar auténtica cocina catalana tradicional para disfrutar de un desayuno para quitarse el sombrero.
Un clásico de la cocina catalana en Lleida
El bar Tòfol es uno de los restaurantes más clásicos de Lleida para tomar un buen desayuno de tenedor. Abierto desde 1954, ofrece desayunos caseros, comidas y cenas, todo con una cocina de mercado y con productos de proximidad de primera calidad. Un restaurante que cierra los fines de semana y que por dentro tiene un estilo rústico con dos salas y un altillo. En las paredes cuelgan decenas de cuadros con fotos de amigos y amigas de los propietarios; gente conocida de la ciudad y de Catalunya que ha pasado por aquí.
El nombre del local, Tòfol, es el apodo que tenía Cristòfol, fundador del restaurante junto con Ramona

Isma es la tercera generación al frente del local. Su padre, que regentaba el bar antes que él, fue jugador del Lleida. Y los fundadores del local, abuelos de Isma, fueron Ramona y Cristòfol. Desde su apertura, el bar Tòfol tiene mucha fama por los platos de cuchara y por las tortillas en honor a Ramona, que hacen en el mismo momento de servir. Y el nombre del local, Tòfol, es el apodo que tenía Cristòfol, fundador del restaurante junto con Ramona.

Para empezar el desayuno, dos de los clásicos del bar Tòfol son la tortilla de puerros y las anchoas. Una tortilla en honor a la abuela Ramona y unas anchoas con su picada de ajo que son un espectáculo. Como no podía ser de otra manera, hoy, en casa, toca disfrutar del fantástico producto de nuestra huerta con una deliciosa ensalada.

Seguimos con el capipota; pero no un capipota cualquiera. Aquí lo hacen con garbanzos y bogavante, un plato nuevo que han incorporado recientemente a la carta y que está triunfando mucho. Otro de los platos que no puede faltar es la longaniza gruesa de Lleida con tomate, un imprescindible tanto por la calidad del producto como por el sabor del plato. Para terminar, cerramos el desayuno con un postre de músico, un plato a la altura de los clásicos que hemos degustado hoy.

El bar Tòfol también tiene mucha fama por sus carnes y su steak tartar, unos platos que se pueden disfrutar al mediodía o por la noche y que también vale mucho la pena venir a probar.