Un antihomenaje a la gastronomía tradicional. De mel i mató habrás comido decenas de veces, siempre a los postres. Pero, ¿por qué no como entrante? Debemos cuidar nuestras tradiciones, claro. Pero también debemos reinventarlas, o directamente crear otras nuevas. Mantener viva nuestra cocina pide copiar, pero también arriesgar y probar nuevas combinaciones… como esta.

LA GOURMETERIA 4 35 F

Ingredientes para 4 personas

  • 2 berenjenas grandes
  • 250 g de mató de vaca
  • 50 g de miel cruda de romero
  • 4 filetes de sardina ahumada
  • 100 g de rúcula
  • Aceite de Oliva Virgen Extra

Receta paso a paso

  1. Calentar una sartén a fuego medio. Sin añadir aceite, poner las berenjenas enteras y tapar. Cocer las berenjenas 15 minutos por cada lado, sin agujerearlas. Apagar y dejar enfriar.
  2. Haga un nido de rúcula en un plato y aliñar sólo con aceite. Cortar las berenjenas por la mitad y ponerlas encima de la rúcula, con la piel por debajo.
  3. Untar el mató por encima, repartiéndolo de manera homogénea.
  4. Con un cuchillo bien afilado, cortar los filetes de sardina en trozos de medio cm. Con un solo movimiento, recoger los cortes con la hoja del cuchillo y ponerlos sobre el requesón. Después, con unas pinzas, separar delicadamente en zigzag.
  5. Finalmente, verter la miel por encima a lo largo de toda la berenjena.

Consejo

Este plato quiere una miel suave, idealmente de romero o de cualquier otra flor de primavera. Sobre todo, evite las mieles de bosque o de sabores especiados y resinosos.

Con qué lo marido?

Te proponemos El Pagès content 2020, de la Bodega La Salada, situado en el Pla del Penedès. Elaborado por Toni Carbó, un campesino sensible de nariz privilegiada, con uvas de Xarel·lo y Parellada (conocida también como Montònec) fermentados con pieles durante dos meses y criado en cemento cuatro meses más. El resultado es un vino tan atrevido como original, saciante, fresco, con oxidaciones elegantes y notas a hierbas.