A la hora de salir de casa, viajar y pasarlo bien, es importante descubrir que hay lugares en los que podemos conectar plenamente con la naturaleza sin invertir dinero o tiempo en costosos viajes. Catalunya esconde grandes tesoros naturales que quizás no conocías hasta la fecha, pero que merece la pena que tengas en mente. Si sueñas con paisajes caribeños como en el golfo de México, empieza por ir a Catalunya.
🏔️ Parece un paisaje de postal de Suiza, pero lo tenemos en Catalunya: no te lo pierdas
🧚♀️ Todos los excursionistas dicen que este rincón de Catalunya es de cuento de hadas, ¡descúbrelo!
Hoy te descubrimos una cueva con playa interior única que te recordará los típicos cenotes, esa especie de profundos agujeros (técnicamente, dolinas) inundados. Un agua cristalina que parece que nace de las profundidades, en esta cueva de Catalunya conecta directamente con un Mar Mediterráneo que tiene mucho que ofrecernos y que dará sitio a grandes momentos. Descubre un paraje único cerca de casa.
La cueva con playa interior que parece México
Los cenotes son unas formaciones naturales muy habituales en México, su nombre deriva del idioma maya “dzonot” que significa “abismo”. Se tenía la creencia de que conectaban al humano con los dioses del inframundo, ya que eran puntos de agua que aparecían en las cuevas. Una especie de viaje interior entre los dos mundos, la superficie y una tierra que se cubría con un agua cristalina que permitía descubrir las profundidades de esta especie de agujeros que han sido objetos de multitud de rituales a lo largo de los siglos. En algunos de ellos, ¡se han encontrado ofrendas e incluso restos de sacrificios humanos!
Aquí en Catalunya no tenemos sacrificios humanos en cenotes, pero sí tenemos una cueva marina que, sin ser un cenote, parece sacada directamente del Yucatán.
La Cova del Llop Marí te trasladará a México sin salir de Catalunya
Situada en Hospitalet del Infant se encuentra la Cova del Llop Marí, una cueva con aguas cristalinas en la que parecerá que estamos en México. A ella solo se puede acceder desde el mar, ya que con el paso de los milenios, las tormentas y los efectos del oleaje (que pese a ser de un mar tranquilo como el Mediterráneo ha dado lugar a fuertes temporales) han esculpido en la piedra una cueva en el que el agua se abre paso.
Al igual en los cenotes de México, pero aumentando la potencia del sonido del agua, podremos entrar dentro de un sitio que conecta lo terrenal con lo celestial. Parece imposible que una obra de tal belleza se haya creado por el azar de un oleaje. ¡Pero así es la Naturaleza!
Para acceder a ella, lo mejor es hacerlo nadando o, fuera de temporada de verano, mejor en kayak o haciendo paddle surf. De hecho, esta cueva es tan popular que para ir en verano hay que reservar plaza. Así que quizá mejor aprovechar este otoño más cálido de lo normal para hacernos una escapada tipo Yucatán, pero sin salir de Catalunya, y sin las aglomeraciones del verano. ¿Qué te parece la idea?