Mientras se continúa investigando cuál es el origen del brote de la peste porcina africana, diversos colectivos del sector ganadero han apuntado a la falta de previsión desde que se encontraron los dos primeros jabalíes infectados. A pesar de que no se han detectado más positivos --se mantienen los 13 confirmados--, se mantienen las restricciones de acceso a la zona de alto riesgo.