Tal día como hoy del año 1939, hace 79 años, en el contexto de la Guerra Civil española (1936-1939) aviones de la Legión Cóndor del régimen nazi alemán y S-79 del régimen fascista italiano —aliados del bando franquista— bombardeaban la ciudad de Figueres y causaban la muerte de 83 personas. El bombardeo del 3 de febrero venía precedido de otros bombardeos anteriores que se habían producido en el transcurso del conflicto. En conjunto los trece bombardeos sobre Figueres causarían la muerte de 281 personas, un balance muy superior al de otras ciudades de Catalunya que tenían un mayor volumen poblacional y que habían sufrido un número similar de ataques.

El bombardeo del 3 de febrero no tan sólo afectó a la población civil de Figueres. El historiador Joan Villarroya en el artículo "El bombardeo de Figueres" que forma parte del libro La Guerra Civil en Catalunya (Ediciones 62, 2005) recoge al testimonio de una refugiada republicana de Madrid que se dirigía a la frontera francesa. En aquel testimonio se relata la muerte de su hijo de diez años y la de tres sobrinos que lo acompañaban: “Todos quedaron enterrados, yo también quedé algo enterrada, pero gracias a unos militares pude salir de los escombros con una niña en brazos que sólo contaba un año de edad y estaba muerta a causa de aquel bombardeo”.

Según el historiador Joan Villarroya, los aviones que bombardearon Figueres lanzaron —desde una altura de 5.000 metros— una cantidad no determinada de bombas —que pesaban 250 kilos cada una— sobre una columna de refugiados que atravesaba la ciudad. El grueso principal de víctimas se produjo en torno a la plaza del Gra. Posteriormente al ataque los servicios de auxilio identificaron a nueve víctimas mortales y contabilizaron setenta y cuatro cuerpos humanos que, a causa de la violencia del ataque, quedaron no identificados: cuarenta y nueve cuerpos adultos y veinticinco cuerpos de niños.