Con el paso de los meses, Xabi Alonso va encontrando el camino para hacer que el Real Madrid se acerque, cada vez más, a jugar de la forma en que él lo desea. El conjunto blanco fichó al que fuera entrenador del Bayer Leverkusen con la idea de que liderara un proyecto a largo plazo, con paciencia, a fuego lento y, eso sí, con muchos éxitos. Algo que, gracias al monumental estado de forma de jugadores como Mbappé o Bellingham, está logrando. Y mientras tanto, va encontrando jugadores muy interesantes como Güler o Tchouaméni, al que ha convertido en uno de los mejores pivotes del planeta.

Sin embargo, justamente por el crecimiento del turco y del francés, hay un peso pesado del vestuario del Real Madrid que le está comenzando a ver las orejas al lobo. Se trata de Fede Valverde, que a principios de temporada le jugó un órdago a Xabi Alonso para no volver a jugar en la banda, un plan que no le salió nada bien al uruguayo, que se ha acabado quedando en la posición de lateral diestro, muy a su pesar.

Si quiere, es el mejor del mundo

La realidad es que, a pesar de ser un crack absoluto en la medular, lo visto recientemente deja muy claro que Fede lo tiene todo para ser un lateral diestro de máximo nivel. De hecho, según muchos, tiene condiciones muy superiores a cracks como Carvajal o Trent Alexander-Arnold, a los que no tiene absolutamente nada que envidiar. De hecho, para Xabi, si Fede se dedica en cuerpo y alma a mejorar su entendimiento del juego desde la banda, puede acabar siendo el mejor del mundo en esa demarcación.

Fede Valverde
Fede Valverde

Falta la voluntad de Fede Valverde

Por ahora, resulta evidente que no está entre los planes de Fede el hecho de pasar a ser lateral diestro. No es una posición que le haga ninguna ilusión y siente que desaprovecha sus cualidades. Ahí tiene menos llegada y se siente escorado y falto de opciones para aportar en ataque. Sin embargo, tiene un gran golpeo de balón, una velocidad endiablada y muy buen juego asociativo. No le falta nada para ser el mejor carrilero diestro del planeta. Solo la voluntad de serlo.

Así pues, Xabi Alonso sabe que debe acabar de convencer a Fede Valverde de las capacidades que tiene y de que puede acabar siendo el mejor del mundo en una posición. En este caso, el único sacrificio pasa por dejar de lado el ego y comenzar a pensar de una forma muy diferente. Y es que ser lateral ya no es solo defender la banda, también implica ser una pieza muy importante en el equipo. Que se lo pregunten a Achraf Hakimi.