Vinícius Júnior ha vuelto a ser amonestado por su actitud en el terreno de juego. Aunque se ha salvado de una sanción económica o deportiva, en el Real Madrid le han vuelto a dar una advertencia por su inadmisible comportamiento durante el último partido, contra el Rayo Vallecano. No fue un buen compañero, y la imagen que dejó estuvo muy lejos de ser la de un profesional de su magnitud, y de uno de los capitanes de la plantilla.

Al margen de su rendimiento, que fue discreto, como prácticamente el de todos los futbolistas, una cosa que sirve para explicar el empate a cero que reflejaba el marcador final, a Xabi Alonso no le gustó nada que no obedeciera sus órdenes. Otra vez, fue un verso libre, e hizo absolutamente todo lo que quiso en el terreno de juego, y no hizo caso a sus indicaciones. Un nuevo gesto de rebeldía y de individualismo, que ya no se puede decir que sorprenda a absolutamente nadie.

Xabi Alonso 

El ’7’ se atrevió a cuestionar los planteamientos del mánager de Tolosa, y se quejó de por no recibir balones al pie, y que intentaran jugar siempre en largo, y no buscarle. “¡No! Juega caralho, hazlo fácil” se le escuchó decir después de una nueva pérdida de balón. Y esto provocó que el entrenador decidiera intervenir, para pedirle que se callara, y en lugar de quejarse y de protestar, animara a sus compañeros e intentara aparecer más en el partido.

Así lo han explicado en el diario ‘Sport’, donde también han recogido la pequeña ‘discusión’ que tuvo con ‘Vini’. Porque el crack del Madrid todo el rato buscaba la acción individual, sin asociarse con nadie, para intentar convertirse en el héroe de la tarde, y dar los tres puntos al equipo. No levantaba la cabeza, y su única obsesión era regatear a todos los oponentes, para poder llegar al área rival, y marcar su gol. Y esto no sirvió para absolutamente nada.

“¡Pásala, hostia!” le gritó Alonso desesperado después de que volviera a perder la posesión por intentar hacer la guerra por su cuenta.

Alonso acabó harto de Vinícius

Alonso acabó totalmente harto de Vinícius, y se demuestra que el gran error que había con Carlo Ancelotti en el banquillo todavía no está corregido. Porque no ha conseguido crear un bloque sólido, donde todos los jugadores trabajen en conjunto, y sean solidarios en los esfuerzos.

Y esto está lastrando al Madrid, que ahora mismo deja muchas dudas.